Por José Luis de la Calva
(AFP).- Uruguay, Egipto, Japón, Senegal y Ucrania fueron elegidos en una votación sin rivales de sus respectivas regiones geográficas para ocupar bancas como miembros no permanentes del Consejo de Seguridad de ONU durante su próximo recambio.
La candidatura de Uruguay fue impulsada por el bloque de América Latina y el Caribe de manera concertada y obtuvo 185 votos, sólo detrás de los 187 conseguidos por Senegal, en el escrutinio celebrado en la Asamblea General de Naciones Unidas, integrada por 193 estados.
Uruguay reemplazará a Chile a partir del 1 de enero próximo por un mandato de dos años. Será la segunda vez que integre el máximo órgano de decisión de Naciones Unidas. La anterior fue en 1965-66.
«Uruguay hará un gran esfuerzo por la vigencia estricta del derecho internacional y por la búsqueda de la solución pacífica de los conflictos», dijo el vice-canciller uruguayo José Luis Cancela en declaraciones a la prensa en Nueva York tras la votación.
Cancela destacó el «largo y serio compromiso» de su país con la ONU, recordando que «40.000 soldados uruguayos han pasado por las distintas misiones de paz de Naciones Unidas» y el «75 por ciento» de las fuerzas armadas «tiene al menos una experiencia en misiones de paz».
El Consejo de Seguridad de la ONU está integrado por cinco miembros permanentes con derecho de veto (Estados Unidos, Rusia, Gran Bretaña, Francia y China) y diez rotativos, repartidos por regiones geográficas.
El bloque latinoamericano cuenta con dos bancas no permanentes. La otra es ocupada actualmente por Venezuela.
Desde Montevideo, el ministro de relaciones Exteriores, Rodolfo Nin Novoa, calificó la elección como «un gran reconocimiento» a Uruguay, un país «que tiene una historia llena de definiciones de carácter democrático» y «de aporte de soluciones a los problemas globales del mundo».
Uruguay recibió felicitaciones por las redes sociales de la subsecretaria estadounidense de Estado para América Latina, Roberta Jacobson, y del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), el ex canciller uruguayo Luis Almagro.
– La cuestión ucraniana –
Además de Chile, concluyen su mandato el 31 de diciembre próximo Chad, Jordania, Lituania y Nigeria.
Los otros miembros no permanentes que continúan en sus bancas durante 2016 son, al margen de Venezuela, España, Angola, Malasia y Nueva Zelanda.
A pesar de no tener oposición, los candidatos necesitaban dos tercios de los votos de la Asamblea para ganar su lugar.
La elección de Ucrania, que consiguió 177 votos, el número más bajo de la votación del jueves, tiene lugar en medio de las tensiones entre Rusia y las potencias occidentales en la ONU por la situación en Crimea, la península ucraniana anexionada por los rusos en marzo del año pasado.
La movida del gobierno del presidente Vladimir Putin se produjo después de que las fuerzas especiales rusas ocuparan Crimea y a raíz de un referéndum que Kiev y los países occidentales consideraron como ilegal.
Tras su elección al Consejo de Seguridad, el presidente ucraniano Petro Poroshenko publicó un victorioso «¡Sí, lo hicimos!» en su página de Facebook.
El voto «abre nuevas posibilidades a Ucrania para proteger su soberanía e integridad territorial», escribió.
De su lado Japón, uno de los países derrotados en la Segunda Guerra Mundial, sobre la cual se armó el vigente sistema de funcionamiento del Consejo de Seguridad, ocupará una banca no permanente por undécima vez.
Para el país asiático se tratará de una oportunidad de insistir con la necesidad de una reforma del máximo órgano de la ONU, para el cual reclama una ampliación de su número total de miembros y una banca permanente, al igual que otros países como Brasil e India.
Esta iniciativa es resistida con dureza por China, Rusia y Estados Unidos.