Por José Luis de la Calva
(PARÍS, Francia).- El presidente de Francia, François Hollande, dio apertura a la Conferencia sobre el Cambio Climatico que auspicia Naciones Unidas, asegurando que «nunca antes el mundo había afrontado un desafío tan grande» como «el futuro del planeta, de la vida».
«Vuestro esfuerzo genera una gran esperanza que no podemos defraudar», expreso Hollande a los lideres del mundo reunidos en esta capital, destacando la amenaza que sufre el planeta y equiparó la importancia de ese desafío a la del combate contra el terrorismo.
Hollande consideró que los 150 jefes de Estado y de Gobierno presentes participan en un día «histórico», en un año que ha marcado «todos los récords» de aumento de temperatura, concentración de dióxido de carbono, sequía o acidificación de los océanos, cuyas víctimas «se cuentan en millones».
«Ningún país está a salvo de las consecuencias», dijo el presidente, que aseguró expresarse en nombre de la «justicia climática» al subrayar que no se puede aceptar que los países más pobres, los que menos emiten, sean los más vulnerables y afectados.
Hollande advirtió de que en esta conferencia está en juego «la paz», y pese a alabar que 190 Estados, «casi totalidad del planeta», hayan formulado ya planes de acción para reducir sus emisiones, recalcó que todavía queda trabajo por hacer.
Dijo que la primera condición para que ese pacto sea bueno, es que defina una trayectoria creíble que permita contener calentamiento a dos grados «y si es posible a 1,5».
Entiende el jefe de Estado francés que ese acuerdo debe ser universal, diferenciado y vinculante, incluir mecanismos de revisión a la altura de los compromisos, cada cinco años, y contar con la solidaridad de todos los países que lo rubrican.
«Las declaraciones de intenciones no bastan. Estamos al borde de la ruptura. París debe ser el punto de partida de una gran mutación. No podemos considerar la naturaleza como una vulgar reserva de recursos. Esa transformación es una obligación moral y una oportunidad mundial», destacó.
Hollande hizo una invitacion a «pensar el planeta como un espacio único», criticó la indiferencia que ha llevado a que se encuentre en la situación actual, y animó a que el pacto de París tenga el listón lo más elevado posible.