Por Sin Reservas
(De: Martín Torino, cronista.com).- A dos días de que llegue Mauricio Macri a la cumbre del Mercosur que se realiza en Paraguay, los equipos técnicos ya empezaron a discutir la postura que debe tomar el ente multinacional ante la política de derechos humanos de Venezuela.
De hecho, en estas reuniones previas, medios de Paraguay anunciaron que el gobierno de Horacio Cartes presentó la propuesta para crear un “grupo de seguimiento de la situación de los derechos humanos en el Mercosur”, en directa alusión a la situación de violaciones de los derechos humanos en Venezuela.
Los equipos técnicos de Argentina, Chile, Brasil, Uruguay, Paraguay y Venezuela discutieron estos puntos ayer. Según la Casa Rosada, debatieron si, en la declaración conjunta de cierre, luego de añadir las felicitaciones por las elecciones en Argentina, agregaban un fragmento en el que resaltaban que no hubo violencia en las elecciones de Venezuela. Desde el gobierno argentino querían agregar un llamado de atención al presidente Nicolás Maduro, quien el jueves amenazó con impugnar y volver a llamar a elecciones en algunos departamentos.
Tras el desayuno de cancilleres, la ministra de Relaciones Exteriores, Susana Malcorra, medirá la temperatura y deberá recomendar a Macri los pasos a seguir. La ministra nacional fue quien puso marcha atrás a la claúsula democrática, luego de que en las elecciones legislativas de Venezuela ganara la oposición. “Si Maduro reconoce el resultado, no hay motivo para pedir la claúsula democrática”, dijo Malcorra.
Pero Macri quiere poner el asunto sobre la mesa y seguramente hablará de la situación en Venezuela durante su exposición ante sus pares. Una jugada que generaría revuelo ya que estará presente Nicolás Maduro, a quien verá por primera vez cara a cara, luego de que el mandatario venezolano evitó asistir a la asunción de Macri. El clima ya se tensó la última semana, luego de que la cancillería venezolana acusó al gobierno nacional de “injerencia” en la política de su país.
La postura más ofensiva es la del presidente argentino quien busca que la declaración conjunta incluya una mención a la situación política de Venezuela. Pero para eso necesita el consenso de los presidentes Horacio Cartes (Paraguay), Dilma Rousseff (Brasil), Tabaré Vázquez (Uruguay) y el propio Nicolás Maduro (Venezuela).
Los equipos técnicos venezolanos se opusieron férreamente a esa iniciativa, según funcionarios argentinos. Por ese camino, Macri chocaría con la pared del reglamento del Mercosur ya que las decisiones se toman por consenso y “con la presencia de todos los Estados parte”. Hasta ayer, estaba confirmada la presencia de todos los integrantes del Mercosur, incluida la de Maduro.
También estarán en la mesa, sin derecho a veto, los mandatarios Evo Morales, de Bolivia, país en trámite de adhesión a Mercosur y Michelle Bachelet, presidenta de Chile, Estado asociado al bloque.
Eso no es todo. Las diferencias respecto a Venezuela y la ausencia de figuras a la cumbre pone en duda una declaración conjunto en el cierre de la cumbre. En especial, el encuentro quedó devaluado por la crisis de Brasil, luego de que renunciara el ministro de Hacienda, Joaquím Levy y su sucesor Nelson Barbosa no viaje a la reunión del Mercosur.
Por estas horas, el cierre podría quedar en boca de cada presidente y Macri se pronunciaría unilateralmente sobre los derechos humanos en Venezuela.
