Por José de Jesús
(NEW YORK, Estados Unidos).- En el entorno donde principalmente nos desenvolvemos en este estado, La Villa Tarrytown y la ciudad de Yonkers, residen empleados del Gobierno Dominicano, y durante toda la campaña electoral de su país constantemente escuchamos quejas de estos.
Entre estas quejas primaban que se sentían hastiados y cansados de tener que hacerle quórum a cada político, disfrazado de funcionario, que venía a este entorno a promover los candidatos del partido en el poder, el de la Liberación Dominicana (PLD).
Comentaban que no podían planificar ninguna actividad, familiar, de estudios, ni nada, porque a cada momento los «invitaban» a participar en una política, una reunión o en un encuentro, como le llamaran.
Pero al viajar al país, nos percatamos que allá la situación no es diferente, nos informan que los infelices empleados públicos los tenían al garete, en zozobra, prácticamente «obligados» a tener que abandonar TODO para hacerle QUORUM también a las actividades del PLD en la República Dominicana.
No importando si tenían compromisos con sus hijos (hasta recién nacidos), con sus mayores, de estudios o cualquier compromiso humano al que debemos responsabilidad u obligación, estaban presionados a participar y regresar casi todos los días a sus hogares tarde en la noche.
La mayoría de los incumbentes de las instituciones estatales formaron uno de los llamados movimientos, naturalmente con los recursos humanos de la institución, le dotaron podemos decir de un «uniforme» (gorra, camiseta y otras indumentarias) para participar en las marchas-carabanas de Danilo Medina identificados.
Pero esos «uniformes» no salieron de sus bolsillos, muchos los disfrazaron de uniformes de la institución para adquirirlos.
Pero eso sí, algunos son «muy inteligentes o delicados» al «obligar» a sus empleados a participar en esos actos políticos, solían decir: «No es obligación que vayan; Pero me gustaría verlos allá».
La situación ha sido tan angustiante que entre los comentarios que pudimos escuchar, figuraban:
«Quiera Dios que no haya <segunda vuelta>, que estamos harto de esto».
Esperemos que este domingo, el Partido de la Liberación Dominicana no se lleve la sorpresa de que:
