Por Ricardo Bustos
Lo primero que nos viene a la mente cuando nos enteramos por los medios que hubo amenaza de bomba en una Escuela, es la reacción de algún chico que no estudió, una broma de mal gusto o bien algún tipo de venganza con algún profesor por notas que no consideran justas, pero jamás que esas llamadas (no tan anónimas) fueran realizadas por personas inescrupulosas que, seguramente provocadas por una ideología siniestra cometieron adultos cuyas edades van desde los 30 a los 60 años.
Es muy triste lo que está sucediendo con el sistema educativo en general como para agregarle mas leña al fuego desde la política y como muestra está la toma inexplicable de los Colegios en la Ciudad de Buenos Aires.
Los medios de Junín, Provincia de Buenos Aires, informan que seis personas, entre ellas cinco mujeres, fueron detenidas por la Policía, acusadas de realizar en los últimos días varias llamadas con amenazas de bomba en colegios de esa importante ciudad. Es increible que sean mujeres las que cometen este tipo de delitos.
Parece que muchos aún no han comprendido que la tecnología actual ya no permite esconderse en el anonimato y fueron los análisis de los especialistas quienes pudieron determinar las identidades de los hoy imputados y capturados después de los allanamientos.
La modalidad empleada por estos delincuentes tenía como metodología llamar al 911, a la línea de emergencia, generando durante varios días caos y temor en varios establecimientos educativos. Imaginemos que en medio de las denuncias, debieron los expertos en explosivos movilizar todo su cuerpo para revisar minuciosamente todas las escuelas con la consiguiente suspensión de clases y la preocupación permanente de la comunidad educativa y los padres de los alumnos.
Según surge de la investigación se identificaron las líneas telefónicas (tan inteligentes no eran cuando cometieron los ilícitos) y la justicia ordenó seis allanamientos.
Es evidente que hay un amplio sector de la población, políticamente hablando, que quiere generar caos y desestabilización a medida que se acerca la fecha de las elecciones. Si hay algo que deberían saber estos delincuentes y los ideólogos de las medidas que llevan adelante, es que la gran mayoría del pueblo argentino ya sabe quienes son y cómo actúan y no va a permitir que nada ni nadie burle o ataque al sistema democrático que tanto sacrificio, dolor y lágrimas ha costado conseguir.
Por estos días, un extraño olor a los años 70 se está sintiendo en algunas regiones del país, especialmente en el sur donde hay datos que aseguran la participación de la mano de obra desocupada de los movimientos guerrilleros Sendero Luminoso (la guerrilla de Perú) y las FARC (guerrilla colombiana que recientemente ha firmado la paz en Colombia pero hay muchos dirigentes que no estaban de acuerdo)
Cuando los periodistas consultan a esta gente que está defendiendo «sus derechos» en los territorios mapuches, no se les reconoce en su fisonomía y vocabulario como herederos de esa raza y mucho menos con argumentos sólidos que permitan establecer una posibilidad de aceptar los reclamos como genuinos.
Por caso, la desaparición de Santiago Maldonado, que hoy tiene en vilo a los argentinos y a quien las fuerzas de seguridad con la justicia están buscando y lo único que encuentran son falsas pistas para desorientar y desviar la investigación. Vale una pregunta ¿Por que el muchacho tenía cuatro celulares si por su profesión con uno le alcanzaba?
A la mayoría de los entrevistados en la comarca mapuche, se los ve con una inseguridad absoluta y no hay quien pueda asegurar que conocía bien al joven Maldonado, como para poder defender alguna hipótesis dentro de la investigación. Lamentablemente cuando la política y la ideología se enfrentan a la justicia, ya sabemos quien gana. Julio López, hace diez años desapareció y, casualmente, nadie sabe dónde está, pero su hijo será candidato por el Partido político de Cristina Kirchner, en las próximas elecciones.
Don Antonio, me decía toda vez que yo quería explicar algo sin fundamento … «no aclares que oscurece» y buscando información en medios del exterior, encuentro un artículo que publica la BBC de Londres en donde el hermano de Santiago, Sergio Maldonado, explica….»que Santiago «no es militante ni activista» sino que simplemente quiso solidarizarse con una protesta de la agrupación Resistencia Ancestral Mapuche-RAM (los mismos que ya quemaron cientos de camiones en Chile e Iglesias de diferentes credos y viviendas de puesteros indefensos a ambos lados de la frontera argentino-chilena) que venía cortando intermitentemente la ruta que conecta a la provincia con Chile. La acción se realizaba para exigir la liberación del líder de la agrupación, Facundo Jones Huala, quien fue detenido en junio pasado y cuya extradición es reclamada por la justicia chilena. Pregunta ¿Si Santiago Maldonado no es activista ni militante…que hacía cortando la ruta cometiendo un acto ilegal?
«No se puede ser y no ser algo al mismo tiempo y bajo el mismo aspecto». Aristóteles (384 AC-322 AC) Filósofo griego.
El autor es: Locutor Nacional-Comunicador.
Capiovi Misiones, Argentina
DNI 7788556