El Ministerio de Defensa a través de la Dirección de Inteligencia del Estado Mayor Conjunto, J-2, incautó un cargamento de mil doscientos cuatro (1,204) sacos de ajo procedente de Haití, con un peso equivalente a 12 toneladas.
El cargamento era transportado en los compartimientos de la tolva cementera del camión marca Mack, el cual fue detenido durante un operativo efectuado en el tramo carretero San Cristóbal-Baní. Al momento de la detención, el conductor del camión identificado como José Alberto De La Cruz Paredes, portaba un manifiesto de carga que especificaba 32 toneladas de cemento de construcción consignadas al Ministerio de Obras Públicas (MOPC), cuya declaración no se correspondía con la mercancía contenida.
Con relación al detenido, fue puesto a disposición del procurador fiscal Constantino Beltré Sánchez, del Distrito Judicial de Peravia.
Las autoridades del organismo militar, al explicar el procedimiento utilizado por los contrabandistas para el ingreso del cargamento a nuestro país, indicaron que inicialmente la mercancía llega desde Haití, transportada hasta Pedernales vía marítima en pequeñas embarcaciones, donde se trasborda al vehículo que la traslada hasta la provincia San Cristóbal, donde finalmente es recogido por camiones tipo Daihatsu, que lo distribuyen en los distintos mercados y establecimientos comerciales de todo el país. Destacaron que normalmente durante la operación del transporte de la mercancía desde Haití, se realizan entre 10 y 12 viajes marítimos.
El Ministerio de Defensa ratificó que el contrabando en todas sus modalidades, debe ser perseguido y erradicado, porque a la larga se convierte en un elemento generador de pobreza. Dado que los artículos contrabandeados, al comercializarse a un precio mucho menor al del mercado local, crean una distorsión en los mercados que redunda en una pérdida de competitividad de las empresas locales. Situación que se traduce en la pérdida de empleos y reducción de los ingresos tanto del sector industrial como comercial. Y naturalmente, afecta sensiblemente las recaudaciones impositivas del Gobierno. Por lo que las Fuerzas Armadas continuarán enfrentando a estos grupos de malhechores, que por mucho tiempo se han dedicado al tráfico de mercancías a través de la frontera dominico-haitiana.