Por Sin Reservas
El Colegio Dominicano de Periodistas, con el apoyo del Programa Internacional para el Desarrollo de la Comunicación de la Unesco, determinó que el 43 % de quienes ejercen periodismo carecen de estudios universitarios especializados en Comunicación Social.
Asimismo que un 10.9 % apenas ha completado la educación secundaria, mientras un 11.6 por ciento solo hizo algún curso técnico, y un 13.4 % que practica el oficio es de otra carrera.
Los datos están contenidos en el libro “Análisis del desarrollo mediático en la República Dominicana”, de la autoría de un equipo coordinado por Adalberto Grullón, quien dijo que este trabajo marca pautas importantes para que los gremios que rigen la labor de los periodistas, las escuelas de Comunicación y las instituciones de interés puedan tomar los datos que se exponen en el libro para convertirlos en políticas y acciones que mejoren el sector.
Señala que el campo del periodismo es constantemente invadido por profesionales de otras áreas, como empresarios, políticos y personas de insuficiente formación ética y académica, lo que implica, en alguna medida, muchos de los problemas de calidad y de ética que se observan en los medios de comunicación.
La investigación analiza las limitadas oportunidades de la formación de los profesionales, como también recoge un marco global de la actividad periodística y su situación.
Precisa que los bajos salarios, largas jornadas laborales, trabajo peligroso sin la protección debida y multiempleo son de los males comunes que afectan la calidad de vida y el ejercicio profesional del periodista en el país.
El salario promedio de los profesionales ronda los 25 mil 730 pesos mensuales, equivalentes a 572 dólares; el 53 % de los profesionales del área tienen dos empleos o más, fenómeno que además de afectar la calidad de vida crea conflictos de intereses.
Insta trabajar para reducir las presiones contra el libre ejercicio por parte de anunciantes y accionistas de los medios. Que el Estado legisle para evitar oligopolios que limitan la libertad de expresión.
La puesta en circulación fue realizada en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, encabezada por el presidente del CDP, Adriano de la Cruz, con autoridades de la PUCMM, personal de la Unesco, periodistas y estudiantes de comunicación.