Por Washington Cabello
(CALIFORNIA, Estados Unidos).- Este estado esta aumentando los esfuerzos por extinguir los voraces incendios que han costado la vida de ocho personas, heridas a decenas, más de mil viviendas, alrededor de mil 600 estructuras y arrasado con cerca de 115 mil hectáreas.
Entre las víctimas fatales se encuentran un voluntario que ayudaba a evacuar a las personas, una señora de 70 años de edad y sus bisnietos, de cuatro y cinco años, un operador de excavadora, dos eran bomberos y un señor de 62 años.
El evento que se originó el pasado 23 de julio, cerca de la ciudad de Redding, de 92 mil habitantes, se encuentra activo en el condado de Shasta, a 400 kilómetros al norte de San Francisco. Unas 10 mil personas del total de 38,000 que habían sido evacuadas de la zona como medida de precaución han podido regresar a sus hogares. Mientras, varias partes del Parque Nacional de Yosemite siguen cerradas debido al incendio “Ferguson”
El gobernador Jerry Brown, quien realizó una visita a los zonas devastadas, hizo un llamado al Presidente Donald Trump, para que el Gobierno Federal, vaya y ayude a California, a combatir y a recuperarse, tal y como lo hizo en el año 2017, cuando un fuego azotó la región vinícola del Estado.
“El presidente ha sido bastante bueno en ayudarnos en desastres, por lo que tengo esperanza. Las tragedias unen a la gente”, exclamó Brown.
Las autoridades relataron que este, el sexto incendio forestal más destructivo en la historia de California, inició, con un roce del rin con el asfalto y las chispas que saltaron comenzaron el llamado incendio “Carr”, de acuerdo con las investigaciones del Departamento de Bosques y Protección contra Incendios de California (Cal Fire).
La conflagración, que en los últimos 12 días ha devorado una área mas grande que Denver, se encuentra contenida en un 30 %, aunque los pronósticos no son favorables, según Cal Fire, por las previsiones de que continuarán las altas temperaturas y los vientos en los próximos días.
El fuego se ha extendido por la maleza seca a lo largo de la carretera estatal 299, y afecta las áreas residenciales de los alrededores de la comunidad de Redding, en el Norte de California.
Los bomberos, que estan utilizando más de 4 mil miembros, 369 camiones tanque y 17 helicópteros y servicios de emergencia, continuaban luchando contra una veintena de fuegos que se sucedieron, tras el primero, que fue provocado por la pinchadura de un neumático.