Por Sin Reservas
Ya descansa, pero no en Paz (hasta que no se haga justicia) el profesor José Miguel de la Rosa, asesinado vilmente por los mismo malditos delincuentes que por un simple celular matan.
Entonces nos preguntamos que de malo hay en que a estos demonios se le aplique la misma medicina, y ya que no tenemos «pena de muerte», que lo fusilen.
El fusilamiento debe caber axactamente en casos como este, pues no se concibe que paguemos combustibles a 242 pesos, para mantener en la cárcel a cosas que no son humanos, porque jamás un maldito de esta calaña puede ser igual a mi.
Peyton, como cariñosamente se le llamaba al educador y deportista, de 34 años de edad, cumplidos el pasado martes 14 de agosto, residente en la calle E 10, sector Invicea, fue asesinado por dos sujetos para robarle el telefono celular, como siempre a bordo de una motocicleta, que lo interceptaron alrededor de las 9:00 de la noche, en la calle Juan Colombo, esquina calle Pedro Arana.
La Policía Nacional ha informado que estas cosas fueron apresadas. Se trata de José Guillermo Vásquez Payano, de 24 años de edad, aprehendido en el sector Perla Antillana, a quien se le ocupó una pistola marca Davis, calibre 32 y Manuel Aracena Abreu, alias Moisés, de 22 años, preso en el sector Villa Liberación.
Ante este hecho y varios otros en este sector el director Regional Santo Domingo Oriental de la Policía Nacional, General de Brigada Ludwig Miguel Suardy Correa, ha permanecido practicamente fijo en el área buscando contrarestar la ola de delincuencia.
Asimismo fue allanada una vivienda en el sector Los Pinos, de Hainamosa, donde encontraron varias motocicletas de diversas marcas y modelos, así como chasis que se presumen robadas.
Las evidencias recolectadas en la escena del crimen, la Policía Científica trata de determinar si coinciden con el arma con la que la noche del miércoles fue baleado el comerciante Brayan Onil Paulino Gómez, de 27 años de edad, quien fue asaltado en la avenida La Pista, esquina calle Diego Alvarado, próximo al Mercado Municipal, de El Almirante, robandole 25 mil pesos, un celular y sus documentos personales.