Por Juan Tomás Valenzuela
Ayer, de un solo fuetazo,
vi que Luis Abinader,
echó fuera del poder
a 20 jaraganazos,
que estaban cruzaos de brazos,
cobrando sin trabajar,
que el ñú había puesto a embajar
sin nunca haber embajado,
cualquierizando el Estado
cuál si fuera un muladar.
Se fue la mái de Maybeth
la hermana de Janalán,
Serulle, Mildred Guzmán,
John Guilliani, de Israel,
Papo Dominguez, Daniel,
José Castillo, de Rusia,
Víctor Grimaldi Carbuccia,
y aunque no la mencionaron,
a otra más que se llevaron
fue a la hija de la “sucia”.
Se lambién a Beriguete,
junto a Humberto Salazar,
y se acaban de llevar
a Esther Mirelys Minyette.
Le pusieron un cohete
por donde no le dá el sol,
al señor embajador
del ítsmo de Panamá,
y el lunes también se vá
el que estaba en Nueballol.
Para hacer más efectiva
su política exterior,
Luis, quito de embajador,
a periodistas y a divas,
a personas conflictivas,
a militares traidores,
traficantes, malhechores,
escorias del Danilismo,
y no me quitó a mi mismo
porque me debe favores.
A más de esta quitadera
de tó estos hijuesumama,
el de la Primera Dama
se fue en esa coladera.
Doña Raquel, fue certera
cuando en esa alocución,
dijo que la corrupción
primaba en ese despacho,
y como ella no es muchacho,
cerraría es maldición.
Juan de los Palotes
21 agosto 2020
