Por Juan Tomás Valenzuela
Solamente 10 minutos,
regando oro corruptor,
le tomó al benefactor
lograr un triunfo absoluto.
No importaron estatutos,
ni reuniones con las bases,
ese líder mala clase
que antes dirigía el Partido,
cayó en manos del ungido
muerto como Kamikaze.
A Leonel se lo advirtieron,
que no desafíe a ese mudo,
que se iba a enliar en un nudo
y asi mismito le hicieron.
Al príncipe lo barrieron
de una manera aplastante,
Temo, Pechito, Amarante,
Margot, Gonzalo Castillo,
le enterraron el cuchillo
de una forma muy frustrante.
Los que viendo las noticias
aún no acaban de entender,
es como el mismo Leonel
es el que dá la primicia.
Ni Nuria Piera, ni Alicia
salen aún del asombro
de ver cargar en sus hombros
a este líder destronado,
a todo un conglomerado
que lo ha reducido a escombros.
Dicen que el mismo Leonel
(El perdedor de esta gesta)
propuso que sean abiertas
la manera de escoger.
A él lo acaban de barrer
en el Comité Central,
sin embargo, este fatal,
que lo fuñeron con J,
hoy celebra su derrota
de manera excepcional.
“La banca pierde y se ríe”
¿Quien recuerda ese estribillo?
Le bajaron el martillo
y el Don todavía sonríe.
No valió que desafié
a nuestro benefactor,
el poder abrazador
de quien paga las facturas,
pudo más que su bravura
y él prefirió el mal menor.
El fuego de un liderazgo
que hoy se reduce a cenizas,
deja mal parada a ASISA
después de este trago amargo.
Lo vencieron largo a largo,
con las primarias abiertas.
Pero aún no acaba la fiesta
de esta pandilla morada
y el que apostó a desbandada
no sabe de contraofertas.
Juan de los Palotes
28 octubre 2018
