Por Juan Tomás Valenzuela
De manera desafiante
dijo Castaños Guzmán,
que pueden parar el can
porque el no se presta a allante.
Ya lo del lo cogió alante,
pa’resolverle a Cristina,
a Pechito, a Medina,
al senador de Santiago
y a Galán, ese otro vago,
igualito a Capulina.
Castaños, cerráo a banda
dijo que no hay vuelta atrás,
que el arrastre se impondrá
de acuerdo a cómo Dios manda.
Ya se emitió la comanda
que protege a senadores,
que asociados a los lores
de la coima y el delito,
se buscaron su chenchito
con corrupto y corruptores.
Entre la demarcaciones
que se quedan sin arrastre,
ninguna está en el desastre
de aquellas contrataciones,
entre el Estado y ladrones
del caso de Lava Jato,
en la que estos 5 gatos
dirigentes del Partido,
se aliaron con el ungido
pa’cometer desacato.
La sentencia complaciente
de la Junta Electoral,
tiene a mal certificar
un proceso decadente,
en la que los adquirientes
de dinero mal habido,
se asocian con el ungido
Para blindar un proceso,
que pueda sacarlo ileso
si no hay bateo y corrido.
Ir a una nueva contienda
de mano de esto bribones,
hará que estas elecciones
se vuelvan una jodienda.
Castaños no suelta prenda
en este oscuro proceso.
Si este man no cae preso
por su proceso viciado,
lo que va a quedá amarrado
es nuestro afán de progreso.
Juan de los Palotes
8 Mayo 2019