Por Juan Tomás Valenzuela
El bandido de Roberto,
que ya perdió por lo mismo,
rebozando de cinismo
ahora nos sale con esto.
-Para conseguir un puesto
designado o electivo,
hay que rezarle al “Ungido”
y pedir su bendición,
o el dios de la corrupción
los puede dejar moridos.-
Secretario sin Cartera
o Ministro de lo Ajeno,
este man soltó veneno
al rey de todas las fieras.
Lo trató como a un cualquiera
al responder a Mckinney,
deciendo que “el Lamborghini
de la carrera política”,
es de la edad paleolítica
y hoy se nos muestra en bikini.
Al proponer sangre nueva
como sus predecesores,
esta chusma lanza horrores
contra el marío de “la beba”.
Siendo parte de la gleba
y su Comité Central,
Roberto, viene a abusar
del prócer, líder y guía,
que tanto le dió comía
cuando la pasaba mal.
Este ofidio y exalcalde
dijo que ningún sector
puede ganar el favor
insultando al “abayarde”.
Robertico, está que arde
con estas declaraciones.
Quien fue aliado a los hampones
de uno y del otro lado,
hablo contra el abogado
sin mirar contemplaciones.
Quien debe estar muy seguro
de lo que aquí se está haciendo,
es el que está promoviendo
estas faltas contra el duro.
Habría que ser muy samuro,
o al contrario, muy astuto,
para apoyar a este puto
que desde la presidencia,
promueve estas indecencias
contra este ser impoluto.
Juan de los Palotes
28 julio 2019