Por Juan Tomás Valenzuela
El Dr. César Castaños,
con lágrimas en los ojos,
ya desistió del antojo
de contratar a un extraño,
para que le pasé el paño
con su láser balbafónico,
a lo del Voto Electrónico
que le consiguió a Danilo,
para hacer que su pupilo
consiga un triunfo hegemónico.
Esta vez, a este bandido
se le chamuscó la vuelta
con tanta gente resuelta
a no echar esto al olvido.
Lo que pretendía el ungido
hacer con este patán,
que ha costado tanto afán
y dinero mal habido,
por el exceso de ruido,
los suizos lo baraján.
Dijo Castaños Guzmán
que esta gente lo ha llamado,
porque están encoj…..
con tó este maldito can.
Que mejor ellos se van
a buscársela a otros lares,
que con lo de Evo Morales
esto está más que caliente
y para el fraude del 20,
que busquen otros canales.
“Mi nou queriendo joudienda”
le dijo el suizo a Castaños,
quien entendía que ese engaño
iba a poner la contienda,
a favor de la “leyenda”
de la política criolla,
el ñame que llegó en olla
del pueblo de Arroyo Cano,
y ha metío tanto la mano
que el dinero le repolla.
“Que nadie se mortifique
con la jodía auditoría,
que ni yo, ni la mai mía
estamos por coger pique”.
“A Juan Bolívar y a Quique,
que son los que más protestan,
vayan a ver si les prestan
un ábaco japonés,
pá que cuenten al revés,
que a lo mejor se indigestan”.
“Vayan a buscarse ustedes
a los que les dé la gana,
pá que vean si esa canana
que yo me busqué fue adrede.
Pero cuando se le enrede
la vaina con el contéo,
vayan a jodé a Pompéo
y déjenme a mi tranquilo,
que lo mío es con Danilo
y no estoy pá cotorreo”.
Juan de los Palotes
14 noviembre 2019