Por Sin Reservas
Tras fallar el fraude electoral del 16 de febrero pasado, que llevó a la suspensión de las elecciones municipales, que hubieron que reprogramar para un mes después, se realizaron el 15 de marzo, el gobierno cometió el crimen de apresar a los señores coronel de la Policia Nacional Ramón Antonio Guzmán Peralta y al empleado de la empresa de telecomunicación Claro, Manuel Antonio Regalado, para buscar que se autoincriminaran y salirse de las patas de los caballos.
A Guzmán Peralta, lo desaparecieron y a Regalado, lo masacraron para que no solo se autoincriminara, sino que involucrara las personas, cuyos nombres ellos le indicaban, pero este señor decidió: «Mejor muerto, antes que convertirme en Chacumbele e involucrar inocentes en este barbarie».
Pues al Regalado, salirle imposible de resposabilizarse del fraude electoral e involucrar a otros, el gobierno no tuvo más que desistir y sacar de cartelera la obra. y fue ahí cuando se volvió a saber del coronel Guzmán Peralta, ya que nadie supo de él mientras se desarrolaba la obra, y hasta la misma policía se atrevió a incriminarlos de inmediato, acusándolos de haber participado en un sabotaje contra el voto automatizado, haciendo un gran papelaso.
Ahora por los daños y perjuicios y las acciones ilegales y violatorias de varias disposiciones del Código Penal y la Constitución de la República, el coronel Ramón Antonio Guzmán Peralta, anuncia que llevará por ante un tribunal a los responsables, incluyendo los que realizaron el allanamiento.
Se recuerda que las «autoridades» fueron tan diligente que no dieron tregua y trataron de sorprender al país buscando de inmediato a estos dos ciudadanos el 17 de febrero en la madrugada, incluso molestaron una residecia donde este no vive.
Guzmán Peralta, recordó que él formaba parte del equipo de avanzada del candidato opositor Luis Abinader y luego de que la Junta Central Electoral suspendiera las elecciones municipales por graves inconvenientes técnicos, fue objeto de un aparatoso allanamiento en casa de sus hijos, a las 3:00 de la madrugada lo cual le pareció innecesario, ilegal y sospechoso.
Dijo que luego se enteró de que se le ligaba a los hechos ocurridos en la JCE. aunque la orden de allanamiento y arresto estaban motivados en razones ajenas a esos hechos. Consideró que estas acciones de parte del Ministerio Público y otros entes involucrados «violan sin lugar a dudas el artículo 148 de la Constitución de la República, asi como los artículos 184 y 341 del Código Penal entre otras varias normas legales».
Advirtió que hará respetar sus derechos legales y constitucionales a cualquier precio, el coronel Guzmán Peralta dijo que reclamará el resarcimiento por los daños causados, para lo cual ha apoderado un equipo de abogados para que lo representen en esta acción que llevará hasta las últimas consecuencias.
Nadie en su sano juicio podría pensar que el coronel Koji Maruyama, es una fábula del señor Manuel Antonio Regalado, ni que se lo soñó, no estamos hablando de un delincuente que para salirse con la suya se le ha ocurrido perjudicar a otro. Además de que no son dos. ni tres, los que han afirmado que el Departamento Nacional de Investigación (DNI) dirigió el fraude electoral.