Por Miguel Florentino Jiménez
Una sociedad se desarrolla y crece dependiendo del conocimiento y actitud de sus ciudadanos, puede crecer a nivel económico, tecnológico y en modernización pero si no tiene ciudadanos educados y una buena convivencia ciudadana de nada sirve ese desarrollo.
Por lo tanto debemos comenzar a observar y analizar el comportamiento de nuestros líderes políticos pues dependiendo de este conocimiento sobre sus actitudes y comportamiento podremos conocer sus sentimientos.
Conocer los sentimientos de una persona es vital para saber de que son capaces de hacer una vez logren un espacio de poder, las miserias humanas está en muchas personas y cuando se combina con el poder se convierte en un detonante para sacar a flote lo peor de un ser humano.
No es posible que tengamos líderes políticos que fomenten los antivalores, como la ingratitud, la mezquindad, la mentira, el engaño, la hipocresía y toda clase de maniobras dañinas al bien vivir.
Cuando el fanatismo sea superado por el conocimiento y razonamiento de los ciudadanos tendremos líderes políticos con más calidad dirigiendo nuestro país, es tiempo de tener una sociedad con mejor convivencia y mejor calidad de vida.
Pero lamentablemente esto lo lograremos cuando tengamos la capacidad de saber elegir los políticos que deben ocupar las posiciones dentro del estado Dominicano.
El autor es: Abogado, articulista y comentarista de radio y televisión
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