Por Juan Tomás Valenzuela
El que ayer en Nueballol
habían desconsiderado,
afirma que hoy, el Estado,
anda de mal en peor.
Quien se hizo rico al vapor,
desde un puesto en el Congreso,
y que no ha caído preso
por gracia de Jean Alain,
denuncia que ahora están
comiéndose masa y hueso.
El mismito Abel Martínez
que aprobó lo de Odebrecht,
en New York, tuvo el tupé
de anunciar a los confines,
que Luis y los Saiyajines
que los sacaron del juego,
están demostrando apego
a los fondos del Estado,
como el mudo descarado,
como él mismo y sus borregos.
Abel, que ahora es candidato
de esa banda de ladrones,
ha tenido los…
junto a un grupo de avivatos,
de formar un insensato
modelo de oposición,
que hablando de corrupción
como tema recurrente,
lo llevaría a presidente,
obviando que es un ladrón.
El problema no es Abel,
él hace lo que se puede.
El problema está redes
y en la silla de Alfiler.
Si el señor Abinader,
no presiona a la justicia,
este aladid de codicia
y cundango patológico,
junto a aquel ñús mitológico
volvería a ser noticia.
Juan de los Palotes
29 agosto 2021
