Por Ana María Ureña
El gobierno de Luis Abinader y el (PRM), consideran que (todos) los ciudadanos de este país «nos chupamos el dedo» o somos ignorantes, desde hace mucho tiempo no se habla de problemas de rabia en el país.
Para eso solo hay que escudriñar en el Internet y no aparecen informaciones relacionadas, pero para desviar la atención de su maldita e inconstitucional decisión de joderle la vida a quien no se preste a las directrices de sus titiriteros internacionales, y si usted -con todo su derecho- no se inyectó el veneno que el gobierno compró, producto del negocio del virus chino, entonces usted tiene que ser desechado.
Y es lo que está sucediendo, por orden de sus jefes en el exterior, lo del gobierno de exigir una ilegal tarjeta de la mal llamada vacuna.
Pero como ha encontrado un gran repudio, lo primero que Luis Abinader decidió, fue hacer lo que realmente se propuso «hacerse el gracioso» y anunciar que su reforma fiscal no va, pues le acechaba lo que sucedió recientemente en Colombia.
Pero Abinader, no se quedó ahí, para seguir con el relajo de las vacunas se inventaron:
«Jornada Nacional de Vacunación Contra la Rabia»
Salud Pública, dice en su desgraciado plan que desde las gobernaciones provinciales está llevando a cabo esta desviación de la macabra mal llamada vacuna contra el mal llamado virus Covid-19 o coronavirus, y así justificar e igualar este plan extranjero con las vacunas reales y normales.
Pero nada, Abinader, se piensa que todos somos ignorantes y estupidos que «nos chupamos el dedo».
Solo queremos recordarle lo pronto que transcurre el tiempo, y que ahorita esta aquí el 24, y cosechará al igual que el perverso mayor Danilo Medina, lo que está sembrando.
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