Por Sin Reservas
Los asesinos del teniente coronel Elpidio Guzmán Pérez, dijeron a las autoridades que el hecho de haberle «lanzado una piedra» a su vehículo era suficiente para quitarle la vida.
Los criminales, Toribio Rosario Recio, de 52 años de edad, y Julio César Acevedo de la Cruz, de 38, relataron que circulaban por el lugar en el carro Toyota Corolla, año 2010, placa A-669208 (el cual fue retenido) cuando recibieron el impacto de la piedra, saliendo del vehículo a enfrentar a la agresión al pensar que se trataba de un acto delincuencial.
«Dijeron que persiguieron al oficial porque salió huyendo y que tras alcanzarlo lo golpearon e hirieron con armas blanca, pero se informó que tiene herida de arma de fuego».
El hecho ocurrió en Los Alcarrizos, pero el cuerpo sin vida de Guzmán Pérez, de 52 años de edad, que estaba vestido con ropa deportiva y que acostumbraba todos los días hacer ejercicios temprano en la mañana, fue encontrado por el vigilante privado Alexis de Los Santos Arias, alrededor de las 5:20 de la mañana, mientras daba una ronda por la parte atrás de la estación de combustibles ubicada en el kilómetro 20 de la Autopista Duarte.
El oficial residía en la calle Los Chicharrones del barrio La Esperanza, y tenía una licencia médica por padecer trastornos mentales y diabetes, informaron familiares. Agregaron que andaba sin su arma en el momento del incidente, ya que el revólver asignado lo tenían guardado en la casa por su condición de salud.
Los acusados residen en la calle Jeremías esquina Mella, del sector La Unión, y en la calle 14 de Los Alcarrizos.
Ahora bien, esa es su versión, pero está muy sospechosa, la justicia debe de averiguar bien, por que esto nos sabe a asalto y atraco.
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