Por Juan Tomás Valenzuela
“Como ya los comesolos
pasamos a oposición,
estoy montando un salón
pá teñir y poner rolos”.
Es la que mató a Pololo
que Rafael, se está metiendo,
porque solo consumiendo
se puede justificar,
una acción tán visceral
de alguien que no esté güeliendo.
Es la escasez de argumentos
y la de creatividad,
que incitan la ambigüedad
de estos falsos elementos.
Es obvio que los momentos
que viven estos ridiículos,
no sale en ningún versículo
de la biblia de Moisés,
por lo tanto, este revés
se origina en sus testículos.
Ver estregando cabezas
a un aspirante al Senado,
testimonia el desenfado
de tó estos perros de presa.
Y con la delicadeza
que este bujarrón de orilla,
le restruja a la chiquilla
su melena ensortijada,
intentando una lavada
que se vé falsa a la milla.
Con tal de agenciarse un voto,
para el grupo de Leonel,
este hombre es capaz de hacer
piruetas en una moto,
besarse él mismo el escroto,
si esto fuere necesario,
o salir al vecindario
con redecilla y tacones,
aunque sus mismos lambones
lo lleven al dispensario.
Juan de los Palotes
18 julio 2022