Por Juan Tomás Valenzuela
La llegada de Trujillo
al espectro electoral,
nos evidencia lo mal
que vamos con estos pillos.
Es una olla de grillos
lo que la Junta destapa,
porque si el nieto del Chapa
puede inscribir su proyecto,
un grupo de homus erecto
lo va a comparar al papa.
El peligro de Leonel
o el cundango de Santiago,
ya no es tan amargo trago
como lo es este lebrel.
No imagino a Abinader
pactar con este azaroso,
para evitar el acoso
de Mariotti o José Frank,
buscando con tanto afán
un acuerdo pundoroso.
Chapitín será atractivo
para los tres candidatos,
por todos los pelagatos
que adoran a este tiovivo.
El grupo de colectivos
que siguen a este patán,
que sin tener ningún plan,
aspira a ser presidente,
podría reunir a más gente
que las del ñú de San Juan.
Aunque parezca chistoso,
la aprobación de esta yunta,
por los miembros de la Junta,
podría ser muy peligroso.
Prefiero a Martínez Pozo
dirigir a cualquier acuerdo,
que a un nieto de aquellos cerdos
que a fuerza de orca y cuchillo,
nos legaron con Trujillo
un tren de malos recuerdos.
Juan de los Palotes
11 junio 2023