Por Washington Cabello
(ATLANTA, Georgia, Estados Unidos).- Los Astros de Houston, volvieron a tomar la delantera en el tercer partido de la 117.ª versión de la Serie Mundial del béisbol de las Grandes Ligas, venciendo a los Bravos de Atlanta, por blanqueada de dos vueltas por cero, en un partido disputado en el Truist Park Stadium, ante 42,898 espectadores.
Esto no ocurría desde el año 2016, cuando en el tercer juego los Indios de Cleveland, vencieron por la mínima a los Cubs de Chicago, una carrera por cero.
Ahora la pizarra se puso dos a uno, y Atlanta espera cortar una racha sin campeonatos por más de veinte años.
Ian Anderson y el eficiente cuerpo de relevo congelaron los bates de los Houston Astros para poner a los Atlanta Braves a la mitad del camino de su primer campeonato desde 1995.
El abridor de los Bravos, Ian Anderson, hizo historia al convertirse en el primer novato con al menos cinco entradas sin hit, ni carrera en una Serie Mundial.
Anderson, trabajó cinco completas, sin permitir hit, regaló tres bases y pasó por las armas a cuatro, saliendo con el juego una carrera por cero, a su favor.
La vez anterior que esto sucedió, fue en las manos de Jeff Tesreau, de los antiguos Gigantes de New York, quien trabajó 5 entradas y un tercio, en el primer juego de la Serie Mundial del año 1912, contra los Medias Rojas de Boston.
Por los Bravos, Derek Lowe, lo logró en un encuentro de playoffs, contra los Gigantes de San Francisco, en la Serie Mundial del año 2010, cuando rabajó cinco entradas y un tercio sin hit ni carrera.
Anderson, fue ayudado por los relevistas que solo permitieron dos indiscutibles a los bateadores de los Astros.
Ellos son AJ Minter, Luke Jackson, Tyler Matzek y el cerrador Will Smith, quienes se encargaron de las últimas cuatro entradas. Smith, se llevó el rescate y ahora tiene dos victorias y cinco salvamentos sin permitir carreras en nueve entradas en los playoffs.
«Ian no iba a tener pitcheos para lanzar nueve innings sin hits. Hizo muchos lanzamientos contra la parte alta del lineup. Me fui con mi instinto en esa situación», dijo Brian Snitker. «Por supuesto que siempre hay un riesgo de fallar, pero estoy conforme con mi decisión», agregó.
La decisión de Snitker, fue cuestionada, pero no significa que no fuera correcta. El bullpen de los Bravos tiene marca de 6-1 y efectividad de 3.18 con 68 ponches en 56.2 entradas durante la actual postemporada.
En el cierre del tercero, Eddie Rosario, negoció boleto, el inicialista Freddie Freeman, bateó hit. El intermedista Ozzie Albies, fue ponchado, pero el antesalista Austinn Riley, bateó doble para dar ventaja 1 por 0 a los Bravos. Pero el novato de los Astros Luis García, dominó a Adam Duvall, con elevado a primera base y al receptor Travis d’Arnaud, con ponche, y así resolvió la rebelión.
Ahora Anderson, tiene promedio de carreras limpias de 1.26 en sus primeras ocho aperturas de postemporada. Desde que la estadística fue creada en 1922, el único pitcher con una efectividad inferior en sus primeras ocho salidas de playoffs es el Cubano Orlando El Duque» Hernández, quien tuvo promedio de 1.22.
Con dos años en la liga, el derecho de 23 años ha logrado hazañas que no pudieron algunos de los mejores pitchers de los Braves y de las ligas mayores.
«Claro que quería competir por el no-hitter, pero sé que iba a ser difícil. Tenemos a pitchers como Matzer, Minter y Luke que lo hacen tan bien y hoy fue así», dijo Anderson, quien tiene promedio de carreras limpias de 1.26 en sus primeras ocho aperturas de postemporada.
El único pitcher con una efectividad inferior en sus primeras ocho salidas de playoffs es el Cubano Orlando «El Duque» Hernández, quien tuvo promedio de 1.22.
Atlanta tenía a los Astros sin imparable hasta que el cubano Aledmys Díaz, bateó un elevado entre el torpedero Dansby Swanson y el jardinero izquierdo, el puertorriqueño Eddie Rosario, abriendo la octava entrada.
«Nuestro pitcheo fue extraordinario», dijo Rosario. «El batazo estaba difícil, no quería chocar con el torpedero. Pensé en tirarme, pero cuando lo vi tan cerca, decidí que no», agregó el boricua.
El antesalista Álex Bregman, bateó sencillo abriendo el noveno inning, pero eso fue todo lo que pudo hacer Houston, uno de los mejores equipos.
Lo más importante para Atlanta fue ponerse 2-1 en la Serie Mundial por primera vez desde 1995, cuando ganó el tercer título de la franquicia, pero el único que tiene en esta ciudad, donde llegó desde Milwaukee en el año 1966.
El sábado, Houston mandará al box al veterano Zack Greinke, mientras que los Bravos tendrán una noche de bullpen. Atlanta tiene 6-0 en su casa en la postemporada. Houston posee marca de 3-3 como visitante desde que arrancaron los playoffs.
«A los muchachos les gusta jugar aquí. Quiero decir, les gusta», dijo Snitker.
«Los muchachos me preguntan durante la temporada, ¿por qué ganas fuera de casa y no ganas en casa y viceversa? No sé que es, pero lo que sé es que a los chicos les gusta jugar aquí. Les gusta estar en casa. Les gusta nuestro ambiente. Solo todo internamente. Nuestros fans son increíbles», agregó.
«Sigo diciéndolo y diciéndolo, esto de ‘Braves Country’ es real. Es muy bueno, y a nuestros jugadores les encanta, lo aprecian, y es una realidad la forma en que esta gente apoya a este club. Y se alimentan de eso. Lo siento, se alimentan de eso», dijo Snitker
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