Abinader provoca desorden: Impide feligreses entren a La Basílica; Igual hizo Fulcar en Parroquia JSES; Vídeo

Por Sin Reservas

Es costumbre de los Cristianos ofrecer las Misas a sus fieles difuntos en el horario programado por las Iglesias. Por ejemplo: Si la Iglesia oficia Misa a las 6:30 de la tarde, extienden la invitación para que los familiares y relacionados acudan a esa hora.

En los casos que nos ocupan recordamos el de su magestad el flamante Ministro de Educación, Roberto Fulcar, quien pidió a la Parroquia Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote (JSES), ofrecer la Homilía por la memoria de su padre (Él la quería a las 5:00 de la tarde y le dijeron que no).

Este sujeto entendió que estaba en el negociaso (Minerd) que le había entregado Luis Abinader, o en su casa, y prohibió la entrada a los feligreses a participar de la Santa Misa. Lo triste de la ocasión es que no apareció nadie que parara la celebración y le informara al sacerdote lo que estaba ocurriendo. Tampoco nadie con la falda o los pantalones bien puestos que armara una vaina que hiciera explotar el momento, que se sintiera adentro y que el Padre tuviera que intervenir.

Lo lamentable es que el Padre José Arismendi de León Helena, se enteró pasada la Santa Misa, por lo que tuvo que emitir un comunicado dejando claro su indignación.

«Ustedes saben que a veces hay personas, que cuando están en el poder se creen que lo pueden todo», expresó el Padre José Arismendi de León Helena.

El Padre José Arismendi, informó a las víctimas que nadie debió haberse tomado esas atribuciones por que él no se las dió a nadie y que le haría llegar su protesta a Roberto Fulcar.

José Arismendi Padre Parroquia JSES envía protesta a Ministro Educación por impedir entrada a Misa

 

Ahora el Día de Nuestra Señora de La Altagracia

Una parte importante de los ciudadanos cada 21 de enero peregrinan hacia la Basílica de Higüey, en la provincia La Altagracia, a rendir tributo u homenaje, a Dar Gracias, ofrecerle o pedir favores o su amparo a Nuestra Señora de La Altagracia, al celebrarse su día.

La ocasión, el presidente de la República y otros farsantes la escogen para estar en el medio (no con su dinero) buscando cámara y tratar de confundir o engañar a la gente, pero no creemos que se crean que están engañando a Dios, pues viven rindiéndole culto al diablo.

Este 21 de enero no fue la excepción, Luis Abinader, se preparó para irse a Higüey, y allá cometió el mismo abuso de los que «cuando están en el poder se creen que lo pueden todo», como expresó el Padre José Arismendi de León Helena, cuando Don Fulcar, hizo una más de las de él.

Los feligreses devotos de Nuestra Señora de La Altagracia, hicieron un sacrificio para trasladarse a la Basílica de Higüey, y se encontraron con que el «DUEÑO» Luis Abinader, estaba y no se podía entrar hasta que él le diera la gana de irse.

Esto provocó la indignación principalmente de las mujeres y protestaron, lo que indujo a los energumenos que pululan en los medios de comunicación a títular: «Varias mujeres provocan desorden en la entrada de la Basílica donde estaba Abinader». Cuando debió ser:

«Abinader, provoca desorden en la entrada de la Basílica por no dejar penetrar a los feligreses»

Lo que escribieron algunos individuos en el texto:

Varias mujeres protagonizaron un incidente en la entrada de la Basílica Nuestra Señora de La Altagracia, en Higüey, al terminar la misa solemne de este 21 de enero, en momentos en que aún se encontraba el presidente Luis Abinader, en su interior.

El incidente ameritó la presencia de la avanzada presidencial y agentes de seguridad que intervinieron para que el suceso no pasara a mayores consecuencias.

Al terminar de la misa, oficiada por el obispo Jesús Castro Marte y cuando el Jefe de Estado y su esposa caminaban hacia el cuadro de la Virgen, como es tradición, una multitud intentó ingresar a la fuerza.

Las cuatro mujeres enfurecidas golpeaban la puerta frontal del templo, mientras los agentes las separaban.

Algunos feligreses (será mamarrachos y secuases) lamentaron el hecho y llamaron a la Policía para que intervenga. El presidente no se percató de lo ocurrido.

Nosotros les preguntamos a estos mequetrefes que redactaron lo anterior:

Si salgo, por ejemplo, de Monte Cristi, a visitar a la Madre de La Altagracia, tengo que joderme por qué Abinader, se proponga hacer bulto con la Virgen y chuparme las horas que le venga en gana esperando que él decida cuando voy a entrar a la Basílica?.

Por eso le vociferaron en medio del abuso:

«Abusadores, abusadores… E’pa fuera que van Abinader… Abusadores del diablo».

Estamos totalmente de acuerdo es con el diablo que viven y a quien les rinden culto, y se creen que todos nos lo chupamos para creerle sus falsedades. Mientras viven:

«A Dios, rogando y con el mazo dando»

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