Por Sin Reservas
Es un secreto a voces el contubernio de autoridades civiles y militares con el narcotráfico, y siempre salen a relucir estos engranajes, principalmente cuando sucede una tragedia.
El cáncer volvió a salir a flote en febrero pasado a raíz de la denuncia del general Aquino Radhamés Reynoso Robles, de que cohabitaban en ese mal «los delincuentes del narcotráfico y miembros del Ministerio Público y de la Policía Nacional» de San Juan de la Maguana.
Tras esa denuncia el director de la Policía, mayor general Ney Aldrin Bautista Almonte, creó una comisión integrada por el Inspector general y el encargado de Asuntos Internos, para que junto al Ministerio Público, investigarán.
De esa investigación se concluyó que el general «No pudo demostrarlo y lo premiaron cancelándolo».
Ahora tras la emboscada que le tendieron en Baní, al coronel Daniel Ramos Álvarez, para asesinarlo, donde se asegura que fue componenda de los narcos encabezado por Rafael Antonio Díaz -Buche- y sus compañeros (miembros de la Policía Nacional), sale contundentemente a debatirse el tema de este cáncer.
Este crimen ha causado un inmenso revuelo, no solo por el daño causado a toda la sociedad, sino porque corfirma el cáncer que denunciara el general Reynoso, además de que ha afectado profundamente los dinteles que soportan la Policía Nacional.
Como en la gran mayoría de los escándalos, ahora se ha recurrido al mismo librito, «sustituir, trasladar y cancelar», y demostrado está que esto en casi un 100 % no ha resuelto y que la metástasis ha continuado su agitado curso. Por lo que de:
La designación del vicealmirante Félix Alburquerque Comprés, como presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) en sustitución del mayor general del Ejército José Eugenio Matos de la Cruz, quien renunció.
La destitución del general Juan Gerónimo Brown Pérez, como jefe de la Regional Sur Central de la Policía, con asiento en Baní.
La cancelación de los que acompañaban al coronel Daniel Ramos Álvarez.
Etc., Etc., Etc.
No esperamos resultados positivos, porque las estadísticas demuestran que el tumor hay que atacarlo con un tratamiento diferente, no solo con radioterapia, porque estas ayudan, pero…