Por José Luis de la Calva
(BERLIN, Alemania).- Alemania arrestó un sospechoso del ataque arrollador con un camión, que asesinó hasta el momento a 12 personas y envió al hospital a alrededor de medio centenar, pero no es el sujeto responsable, por lo que esta tras la caza de un sospechoso tunecino de 21 años de edad, que tiene conexión con los asesinos del Estado Islámico y que entro al país hace exactamente un año, en diciembre del 2015.
El verdadero delincuente del ataque al mercado navideño de Berlín, está armado y sigue en libertad. La policía encontró en el piso de la cabina del camión la documentación de Anis A. o Ahmed A. (Bild). Este documento las autoridades alemanas lo expiden a las personas cuya solicitud de asilo ha sido rechazada (Anis A. fue rechazado en junio) pero cuya expulsión del país se ha paralizado por algún motivo. Informó el ministro del Interior del Estado de Renania del Norte Westfalia, que no pudo ser expulsado del país por falta de papeles válidos.
Las autoridades habian perdido todo contacto con el sospechoso. Se conoció que estuvo en contacto con Abu Walaa, un islamista detenido en noviembre junto con otos cuatro, quienes formaban parte de una red que aportaba combatientes al Estado Islámico.
El Spiegel online, aseguró que Anis A., estaba en la lista personas que debería estar sometido a controles intensivos, por sus actividades islamistas. Este también esta registrado con otros nombres y nacionalidades.
La canciller alemana, Angela Merkel, aseguró que ha sido un atentado.
«Tenemos al hombre equivocado», ha revelado la Policía de Berlín, agregando que «el verdadero culpable todavía está armado y puede causar nuevos daños».
Ya se ha informado de esta situación a los agentes antidisturbios y las fuerzas especiales de la capital, dijo el jefe de policía, confirmando que no están seguros de que el detenido sea el responsable de la tragedia.
Anteriormente, el ministro del Interior de Alemania, Thomas de Maizière, ha informado que el sospechoso detenido –un hombre originario de Pakistán que llegó a Alemania el 31 de diciembre de 2015– niega su complicidad en el ataque.