Por Sin Reservas
Hoy se cumplen 21 años de que 19 viles terroristas islámicos atacaron símbolos importantes del poder de los Estados Unidos y asesinaron a más de tres mil personas.
Los terroristas secuestraron cuatro aviones Boeing estadunidenses con un total de 265 personas a bordo, y con estos cambiaron el curso de la historia.
La masacre ocurrió el 11 de septiembre del año 2001, cuando a las 08:46 un avión impactó contra la torre norte del World Trade Center, en Nueva York, y se incendió. A las 09:03, la segunda aeronave se estrelló contra la torre sur, de 411 metros de altura.
Derribaron las torres del World Trade Center (WTC), en Nueva York. Las imágenes del derrumbe fueron difundidas en todo el planeta y causaron espanto.
El mundo horrorizado al ver la transmisión en directo por televisión donde personas saltaban desde los pisos en llamas del WTC. A las 09:59, se desplomó la torre sur y a las 10:28, la torre gemela norte.
Entre los escombros del World Trade Center quedaron sepultadas más de dos mil 750 personas. También murieron los diez secuestradores.
Apenas 34 minutos después, el tercer avión impactó contra el Pentágono, en Washington, tras lo cual la cuarta aeronave se precipitó a tierra en Pittsburgh, Pennsylvania.
De esta cuarta aeronave -se dijo- que pretendían estrellarla contra la Casa Blanca, por lo que -se dijo- fue derribada.
En Washington hubo unos 190 muertos, entre ellos cinco secuestradores. Y en Pennsylvania murieron las 44 personas que viajaban en el avión, entre ellos cuatro secuestradores.
Reacción de los Estados Unidos
El país reaccionó al ataque con un operativo militar en Afganistán, donde sospechaba que se encontraba el cerebro de los atentados, Osama Bin Laden.
Con el respaldo de Reino Unido, logró derrocar a fines de 2001 el régimen talibán. Luego, el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) decidió crear una tropa internacional para Afganistán.
Desde entonces hay estacionados en ese país decenas de miles de soldados de más de 40 países.
«Estados Unidos fue golpeado por Alá en su punto más vulnerable, destruyendo gracias a Dios, sus más prestigiosos edificios», dijo el más maldito satánico, Osama Bin Laden, el 7 de octubre del año 2001.
Después de mucho huir y seguir planeando volver a realizar otra masacre en los Estados Unidos, estos lo buscaron sigilosamente, y el dueño Al Qaeda, como le llamaba a su negocio maldito, fue pescado asando batatas y enviado al infierno.
Este maldito demonio fue abatido por los Navy Seals norteamericanos en mayo del año 2011 (2011, para que guarde alguna relación con el día 11) gracias a la operación llevada a cabo en la ciudad de Abbottabad, en Pakistán, donde llevaba mucho tiempo escondido en una guarida secreta, acabándosele de esa forma el secreto para toda la vida.
No jode más esa maldita cosa…!!!
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