Por Washington Cabello
(VIRGINIA, Estados Unidos).- Los ciudadanos de este país se involucraron en el plan contra los valores que lideró el Partido Demócrata (PD) con Joe Biden, como candidato, y en contra del Partido Republicano (PR) y el Presidente Donald Trump, para las pasadas elecciones presidenciales.
Y aunque esto de los valores, la prostitución, la corrupción, la mariconería, el golpeo contra la familia, no es asunto exclusivo de los demócratas, estos los promueven sin ningún prigilio, tal como promover un pan con queso.
Pero ese affaire (por suerte) ha durado poco, y solo bastó un año para que los ciudadanos se dieran cuenta de su error y han iniciado la marcha atrás.
El ejemplo más palpable es el resultado este martes, día 2 de los corrientes de los comicios en este Estado y en Nueva Jersey.
Virginia que por mucho tiempo estuvo en manos de los demócratas y fue decicivo para que Biden, esté hoy en la Casa Blanca, le dio una sorpresa, al imponerse el republicano Glenn Youngkin, sobre Terry McAuliffe, con el 51 %, más de 1,655,000 de los votos.
Youngkin, es un empresario sin experiencia política que hizo de la influencia de los padres en las escuelas un tema central de su campaña.
Enseguida, el expresidente Donald Trump, celebró la victoria de Youngkin, un «verdadero patriota» de «Estados Unidos primero», el que fuera su lema de campaña para las elecciones presidenciales que ganó enen año 2016.
Trump automáticamente dio crédito a su base electoral por haber «salido a votar con fuerza» y haber convertido a Youngkin en gobernador de Virginia para los próximos cuatro años
Pero todo no quedó en Youngkin, y sin importar que todos se lanzaran a hacer campaña en Virginia por la candidatura de McAuliffe, por considerarla una elección clave, como Barack Obama, también la republicana Winsome Sears, una exmarina, migrante desde Jamaica, cuando era niña, y Jason Miyares, se impusieron como Vicegobernador y Fiscal General, respectivamente.
Tambien hubo un descalabro para Joe Biden, y los demócratas en Nueva Jersey, que aunque no perdieron, quedaron prácticamente empatados.
El demócrata Phil Murphy, obtuvo el 50,03 % de los votos, frente al 49,22 % del republicano Jack Ciatarelli., quien en una oportunidad estuvo por encima en las encuestas.
Estas elecciones suponen el primer test en las urnas de Biden, desde que llegó a la Casa Blanca hace un año y, además, son un primer medidor de actitud de los estadounidenses de cara a las elecciones legislativas de 2022, en las que los demócratas temen perder sus mayorías en el Congreso.
No obstante, parecen haber evitado el desastre total gracias a la Cámara Baja del Legislativo, donde el recuento aún sin finalizar parece arrojar un empate a 50 asientos, sin que exista un mecanismo para el desempate.
Horas antes, en una rueda de prensa en Glasgow, Escocia, «Biden, predijo una victoria demócrata en Virginia» y Nueva Jersey, donde aún no se conoce un ganador, pero las cosas pintan peor para los demócratas de lo anticipado por las encuestas.
Terry McAuliffe, quien ya fue gobernador de este estado entre el año 2014 y el 2018, consiguió un 48,3 %, 1.570.000 de los votos.
Imagen: Glenn Youngkin, juega baloncesto el día de las elecciones en la escuela secundaria Rocky Run, en Fairfax. (EFE / EPA / Shawn Thew)
*
