Por Washington Cabello
(SANTIAGO, Chile).- La inmigración haitiana ha estado llegando a casi todos los países de la región y este no es la excepción, esta se ha incrementado en los últimos meses, lo que ha desatado un rechazo de la población.
Se estima, que más de diez mil haitianos han estrado a Chile en este año. Y como en todos los países, la gente esta renuente a aceptarlo, excepto Estados Unidos, que los que no los quieren allá son las autoridades, que prefieren visar a cualquier otro ciudadano, menos a los de Haití.
Un ejemplo es la República Dominicana, que ya son millones los que han invadido el país y los estadounidenses, otorgan visado a cualquier dominicano sin calificar, con tal de liberar un espacio para que el haitiano se quede allí.
Gracias a la legislación vigente, en Chile pueden regularizar su estatus migratorio desde la calidad de turista a residente si poseen un contrato de trabajo, por lo que poco a poco han ido ocupando algunos oficios donde ganan el sueldo mínimo, 388 dólares.
Expendedores de gasolina, obreros, carpinteros, aseadores y jardineros son algunos de los trabajos donde ahora es habitual ver a personas de raza negra, quienes ven a Chile como un lugar ideal para surgir y juntar dinero para traer a sus familias.
La mayoría aparte del sueldo mínimo, consigue propinas, parte del cual es enviado a sus países de origen o ahorrado para comprar los pasajes aéreos que les permita a sus familiares directos llegar a Chile.