Por Washington Cabello
(WASHINGTON, D.C., Estados Unidos).- Cuando de indocumentados o de personas que hayan violado las leyes de este país se trata, las autoridades no se detienen en expulsarlos de su territorio y ellos mismos los trasladan hacia su país de origen.
Para tomar la decisión a estos no les importa absolutamente nada, aún cuando informaron que suspendían temporalmente las expulsiones por la pandemia del coronavirus, deportaron a 66 migrantes de Guatemala, vía aérea. Sumando 10,668 en lo que va de año, mientras que el año 2019 deportaron 54,599.
La información fue dada a conocer por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala, quien hace una semana informó que todos los vuelos de deportación se detendrían como medida de prevención por el coronavirus.
«Los vuelos de guatemaltecos deportados se han reactivado de manera parcial», indicó la cancillería en un comunicado.
A propósito del Covid-19 o coronavirus, el presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, ordenó el cierre de comercios y la suspensión la docencia en los centros educativos y el transporte. Aquí se han detectados nueve casos y una persona muerta.
A los deportados llegaron a la base de la Fuerza Aérea de la capital, tras realizarles pruebas sanitarias de prevención, fueron trasladados en vehículos del gobierno a sus casas, donde deberán guardar una cuarentena, informó el Instituto de Migración local.
La nota indica que el Ministerio de Salud local realiza una evaluación completa para garantizar que ningún retornado padezca ninguno de los síntomas del coronavirus.
En tanto, se mantienen suspendidos los traslados de migrantes hondureños y salvadoreños a Guatemala, como recoge un acuerdo de asilo firmado entre el país centroamericano y los Estados Unidos, para intentar frenar la migración irregular.