Por José Luis de la Calva
(HOKKAIDO, Japón).- Dos fuertes terremotos le prosiguieron al tifón Jebi, que dejó hasta el momento 11 personas muertas y más de 400 heridas e incalculables daños materiales, informó el ministro portavoz del Ejecutivo, Yoshihide Suga.
Suga, dijo que la mayoría de las víctimas fueron por caídas a causa de las ráfagas de vientos y por golpe de objetos proyectados por el viento.
Jebi, que arrasó la mitad occidental de Japón, al atravesar el archipiélago desde el suroeste hasta el norte, ha perdido fuerza, convirtiéndose en una tormenta.
Los fuertes movimientos teluricos se registraron la ciudad de Chitose, en la isla de Hokkaido, al norte del país. El primero con una intensidad de 6.7 grados en la Escala de Richter (6 en la escala japonesa shindo), a 31 kilómetros de profundidad, a aproximadamente 20 kilómetros de Chitose, y el segundo de 5.3 grados, muy cerca del primero, con epicentro a 37 kilómetros de profundidad.
Hasta el momento no se han reportado víctimas, ni se ha emitido alerta de tsunami. La información fue dada a conocer por el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Cientos de pasajeros quedaron varados en el Aeropuerto internacional de Kansai, ubicado en una isla artificial en la bahía de Osaka, a causa de las inundaciones.
Jebi, ha sido el tifón más poderoso desde 1993, los últimos 25 años, sobrepasó categoría 3. Ha dejado lluvias torrenciales, desbordamientos de ríos y vientos que han superado los 220 kilómetros por hora, lo que ha causado cuantiosos daños materiales en edificios y vehículos y sembrado el caos en los transportes.
Más de 700 vuelos cancelados y un millón 600 mil hogares sin energía eléctrica, asimismo más de un millón de personas fueron evacuadas.
El nivel del mar creció por sobre los 2,4 metros, lo que provocó que decenas de barcos se encuentre a la deriba.