Por Ricardo Bustos
Cada mañana cuando nos levantamos, por los Diarios, Radios o Televisión, nos enteramos que algún adolescente cometió un robo a mano de armada y en muchos casos dejando familias destruidas por alguna muerte de quien aún sin resistirse al ataque es salvajemente asesinado.
Hay una cantidad enorme de ciudadanos que han sido víctimas de este tipo de delitos que han salvado sus vidas de milagro pero quedaron con graves secuelas en sus cuerpos por las heridas producidas con todo tipo de armas al momento del ataque, motivo por el cual no pueden continuar sus actividades con normalidad.
Siempre se habla de la responsabilidad de los mayores cuando los adolescentes andan por el camino equivocado, pero en la realidad nunca ocurre nada que nos haga ver algún resultado positivo por parte de la justicia hacia los progenitores que no cumplen con el rol que tienen asignado en la sociedad.
Es muy triste ver que en países tan pequeños como Uruguay, con problemas económicos mas o menos como los nuestros, aunque eso no hace al tema, los ejemplos llegan desde las más altas esferas del poder para que sus ciudadanos sepan que no es broma cuando de poner orden y aplicar la Ley se trata.
Por estos días, en los que miles de turistas argentinos visitan las playas de Punta del Este, sería bueno que se informaran cómo trata la Justicia de Uruguay a los adolescentes que cometen actos reñidos con la Ley.
No hace mucho, una jueza del Departamento Maldonado, imputó el delito de omisión a los deberes inherentes a la patria potestad, a los padres de un chico de 15 años y los envió directamente a la cárcel en la prisión de “Las Rosas”. Dicha medida fue tomada por la Dra. Adriana Graziuso quien estaba a cargo de la causa en la que se involucra a tres menores de edad que fueron detenidos después de robar en 6 oportunidades.
Los padres de uno de los menores tienen 36 y 38 años y su hijo fue sorprendido llevando un arma en su mochila que había utilizado en los robos. Ante la pregunta de rigor de la Jueza a los padres sobre la reacción que habían tenido cuando vieron el arma en poder de su hijo, solo se limitaron a decir que… “le habían pedido que la devolviera”, por eso y ante la liviandad de la respuesta, además de no haber realizado la denuncia correspondiente ante la autoridad, la Fiscal pidió el procesamiento de los mayores pero sin prisión, aunque la Jueza fue un poco más allá y al declarar que “había omisión a los deberes inherentes a la patria potestad”, decidió enviarlos a la cárcel y a los menores ordenó se los trasladen a un Instituto de rehabilitación (INAU), aunque a uno de ellos se le inició un procedimiento por la comisión de reiteradas rapiñas.
Los muchachos habían asaltado, entre otros comercios, dos farmacias, una estación de servicio y un ómnibus del transporte local de pasajeros.
En la República Oriental del Uruguay, Argentina o cualquier país que tenga la voluntad de cambiar esta grave situación por la que atraviesa la juventud, abandonada a la mano del destino, debería discutirse seriamente la posibilidad de quitar la patria potestad a los padres de hijos que delinquen y lo hacen de manera reiterada, convirtiéndose en cómplices por omisión y falta de responsabilidad.
Bajar o no la edad de imputabilidad de los jóvenes delincuentes, será cuestión de los Legisladores y la Justicia, pero algo habrá que hacer.
«Adquirir desde jóvenes tales o cuales hábitos no tiene poca importancia: tiene una importancia absoluta» Aristóteles (384 AC-322 AC) Filósofo griego.
El autor es: Locutor Nacional-Comunicador.
Capiovi Misiones, Argentina
DNI 7788556