Por Ricardo Bustos
Un estudio mundial sobre Uruguay, presentado en Montevideo por la Oficina de Planeamiento y Presupuesto de la Presidencia Charrúa, indica que la mayoría de los uruguayos respeta la autoridad y cree que es un valor importante a transmitir a las nuevas generaciones.
El 45% de los uruguayos, una mayoría relativa, considera que los pobres están en esa condición «por flojos y falta de voluntad».
Esto refleja un cambio en la percepción de los uruguayos sobre las causas de la pobreza. Esa visión sobre las causas se ha ido incrementando de forma significativa: en 1996 era un 12%, en 2006 se había duplicado a un 26%, y en la medición del 2011 alcanza a 45% de los uruguayos.
En el sentido opuesto, la cantidad de personas que consideran que «son pobres porque la sociedad los trata injustamente» ha disminuido notoriamente, de una mayoría absoluta y contundente en 1996 (77%), a 47% en 2006, y finalmente a alrededor de un tercio (34%) en 2011.
El cambio en la visión está relacionado, según el análisis de Equipos, con que un 43% considera que el gobierno está tomando las acciones adecuadas para combatir la pobreza y un 60% entiende que a partir de ello «es posible» salir. De hecho, los uruguayos creen que «mucha gente lo ha logrado» por lo que «quienes permanecen en condición de pobreza son vistos como más responsables de su situación».
Los uruguayos también han cambiado su actitud frente a la autoridad y ha crecido el «respeto» hacia ésta, incluso entre los más jóvenes. Dos de cada tres uruguayos (el 66%) opina que sería bueno que en el futuro hubiera un «mayor respeto a la autoridad», y 52% considera que la «obediencia» es una de las cinco cualidades para enseñarle a un niño.
En este sentido, el 82% también sostiene que la tolerancia y el respeto por los demás es una de las cualidades más importantes a transmitir.
El 89% de los uruguayos considera que «nunca se justifica» que un hombre le pegue a una mujer y con este guarismo el país se posiciona cuarto a nivel mundial en donde menos se justifica una acción de tal tipo, pese al incremento que ha tenido la violencia doméstica en el país.
El 82% de uruguayos aprueba que una mujer decida ser madre soltera, sin relación estable. Como contrapartida, el informe destaca que la mayoría de los uruguayos piensa que una mujer no necesita tener niños para realizarse en la vida. Para los uruguayos lo más importante en su vida es la familia. (Don Ricardo, excúseme, voy a colocar una pregunta: Y esta contradicción…??).
Uruguay es un país pequeño , pero al mantener vivos los principios de democracia verdadera, se permite poder exponer ante el mundo sus virtudes y defectos sin ningún tipo de timidez o modestia, máxime sabiendo que ha sufrido el peso de una dictadura que dejó marcas imborrables en el desarrollo social y psicológico de sus habitantes.
Las comparaciones siempre han sido odiosas, por ello es mejor que cada uno de nosotros, los argentinos, saquemos las conclusiones del caso y en última instancia, aunque sea en silencio, hagamos algún tipo de autocrítica para comprender por qué estamos así… aceptando sin condicionamientos los motivos que nos han llevado a esta situación, máxime cuando somos reconocidos en el mundo entero por nuestro espíritu de lucha ante cualquier adversidad.
Quizá llegó la hora de probar un poco de esa felicidad que disfrutan muchos ciudadanos en algunos países de América Latina y en una de esas quizá nos contagiemos de esas formas de vida que para muchos dirigentes nuestros es retrógrada o ideológicamente despreciable. Obviamente, somos los únicos en subsidios de semejante magnitud y quizá sea por eso que nuestro pueblo no ponga tanto interés en buscar una felicidad con esfuerzo, pero eso también se puede corregir cuando nos demos cuenta que es un espejismo y el desierto tarde o temprano aparezca tal cual es.
Ya no se puede pensar más en Derecha o Izquierda como idea, el mundo mira hacia adelante y aún con los tropiezos lógicos de quienes hacen por el progreso, seguramente un camino próspero nos estará esperando con los brazos abiertos.
De nosotros depende si seguimos viviendo en una pseudo democracia o en libertad.
El autor es: Locutor Nacional-Comunicador.
Capiovi Misiones, Argentina
DNI 7788556