Por Sin Reservas
(LIMA, Perú).- Hay un refrán que reza: «Así no hay becerro que llegue a buey», y le cabe exactamente a la delegación que envió el títere narcodictador de Venezuela, Nicolás Maduro, a este país para competir en Lima 2019.
Estos han revelado que prácticamente lo que comen (como si fuesen aves) es:
Arroz y granos.
No es secreto para nadie, todos sabemos que en Venezuela, se pasa hambre y los que comen, lo hacen muy mal, no se alimentan, pues aunque consigan los chelitos, no aparecen lo que quisieran comer, la carne, por ejemplo.
Y nos los acaban de confirmar los infelices que están pasando vergüenza en Lima 2019, han confesado su cruel situación, y dicen que:
Cuestiones tan elementales como las vitaminas e implementos, como una simples zapatillas y gafas, resultan difícil e imposible de conseguir.
Otra atleta, expuso a AP: «En realidad esto está duro como todos saben». «No podemos tener una dieta como tal, no tenemos las proteínas, carnes; tienes que comer lo que tenga en tu casa, más que todo arroz y granos».
El caso de Paola Pérez (cuya imagen ilustra esta opinión), nadadora venezolana que sufrió un ataque de hipotermia por no llevar el bañador adecuado.
Pérez, viene de ganar plata en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015, en aguas abiertas.
Este es el resultado de estar en la cola del medallero, que hasta este momento suman 13, en el último puesto. Un país con un inmenso potencial humano y económico, pero que ha sido destruido, hasta convertirlo en un Estado fallido, por los asesinos que lo desgobierna.
Pero la banda criminal de Miraflores y Cuba, mantienen su linea, que es culpar a un chivo expiatorio, que en el mayor de los casos, le echan manos a los Estados Unidos, y en este el imperio, donde ellos gustan gastar y guardar lo robado, es el culpable por las sanciones económicas que les imponen.
Imagen: Paola Pérez, luce afligida tras el suceso