Por Washington Cabello
(WASHINGTON, D.C., Estados Unidos).- El Gobierno de este país otorgó el amparo migratorio «Estatus de Protección Temporal» (TPS, en inglés) a alrededor de 323,000 venezolanos residentes, que, protegidos por ese permiso, no serán deportados y podrán trabajar legalmente durante los próximos 18 meses, desde el pasado día 9 de marzo del año 2021, hasta el 9 de septiembre del 2022.
Estos ciudadanos son exiliados expulsados de su país por la crisis económica en que tiene sumida a Venezuela, la dictadura del títere Nicolás Maduro, sus secuases, esbirros y titiriteros.
El Estatus de Protección Temporal (TPS) fue creado por el Congreso de los Estados Unidos, bajo en la Ley de Inmigración del año 1990, para cobijar a personas procedentes de países que sufran un conflicto armado, desastres naturales o condiciones extraordinarias y temporales y su concesión es competencia del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), previa consulta con la cartera de Exteriores.
«La medida se debe a las condiciones extraordinarias y temporales existentes en Venezuela, que evitan que los nacionales regresen a su país de manera segura», dijo Alejandro Mayorkas, Secretario de Seguridad Nacional.
Agregando que además, existe en Venezuela «una crisis humanitaria compleja, marcada por el hambre y la desnutrición generalizadas, una creciente influencia y presencia de grupos armados no estatales, represión y una infraestructura en mal estado».
Hablando a través de un comunicado Mayorkas, expresa que «es en tiempos de circunstancias extraordinarias y temporales como estas, que los Estados Unidos, da un paso al frente para apoyar a los nacionales venezolanos elegibles, que están actualmente presentes en los Estados Unidos, mientras su país de origen busca recuperarse de las crisis actuales».
Los interesados para ser elegible deben demostrar que han residido de forma continua en los Estados Unidos, hasta el 8 de marzo pasado, y tienen un período de registro de 180 días, hasta el 5 de septiembre del presente año 2021. Estos podrán solicitar un documento de autorización de empleo (EAD) y otro de viaje.
Con estas medidas también han sido beneficiados residentes de El Salvador, Haití, Honduras, Nepal, Nicaragua, Somalia, Sudán, Siria y Yemen.
La decisión de Biden, llega después de que su antecesor, Donald Trump, aprobara el pasado 19 de enero, en una de sus últimas decisiones en la Casa Blanca, otro amparo para los venezolanos, la Salida Obligatoria Diferida (DED, en inglés), que evitaba la deportación por 18 meses y concedía permisos temporales de trabajo.
A diferencia del TPS, el DED, que evita la expulsión de EE.UU. de nacionales de países afectados por conflictos, desastres naturales o condiciones excepcionales, es concedido directamente por el presidente de los EE.UU. y no incluye el permiso de viaje.
Ni el TPS ni el DED conceden la residencia a los beneficiarios, ya que se trata de protecciones temporales.
Imagen: Ciudadanos en Venezuela, obligados a buscar que comer en los basureros
*