Por José Luis de la Calva
«Primero explota en el aire y luego lo hace varias veces en la tierra»
(actualidad.rt.com).- La organización no gubernamental Human Rights Watch se ha cerciorado del uso por la aviación saudita de las prohibidas bombas de racimo en Yemen. Las fotos tomadas por una delegación del grupo dejan constancia de un bombardeo en la norteña gobernación yemení de Sa’ada.
Un residente del municipio de Marran, en dicha provincia, relató a los inspectores de HRW que resultó herido a causa de un ataque con bombas de racimo. «Primero explota en el aire y luego lo hace varias veces en la tierra», describió.
«Estas armas son incapaces de distinguir los objetivos militares y los civiles y sus submuniciones no detonadas amenazan a los civiles, especialmente a los niños, incluso mucho después de que sean disparadas», recuerda la organización en su comunicado al respecto.
En una serie de imágenes tuiteada por una colaboradora del grupo se aprecian varias municiones tipo ZP-39, que solo pueden ser potadas por una bomba de racimo, desparramadas por la aldea de Baqim y otras dos localidades de la misma gobernación.
El comunicado agrega que su suministro fue acordado en agosto de 2013 dentro de un contrato que estipulaba el envío a Riad de 1.300 bombas de caída libre estadounidenses CBU-105.