Por Ricardo Bustos
Una vez mas la imagen de la desolación en muchos pueblos y ciudades, será la postal que nos deja este nuevo «feriado largo» que coincide con el día 24 de marzo antes de un sábado. Algunos, por motivos diversos, no podrán dejar sus tareas y por ello no pueden ser criticados.
Un poco de historia para los «muchos argentinos» que ignoran el origen de este feriado, no vendría mal para ilustrar a quienes opinan desde diferentes veredas, olvidando que hay estamentos del Estado que se han encargado de darle marco legal a la fecha, incluso aquellos que, embanderados en rótulos imaginarios, sin haber participado jamás en contienda alguna que haya justificado la defensa de la República, participan activamente en actos, cortando calles, ocupando espacios públicos y haciendo escuchar sus voces como si fueran expertos en historia contemporánea y habrá también algunos a los que esta y otras fechas «emblemáticas» ideológicamente hablando, les representan buenos negocios y «tracción» militante.
A nadie escapa que un golpe de estado o un atentado a la nación en cualquiera de sus formas es y será rechazado por la mayoría de la ciudadanía, pero de ahí a hacerse dueños de una fecha montados en la ideología, deja sospechas que no se pueden disimular.
El 2 de agosto de 2002, el Honorable Congreso de la Nación Argentina, dictó la ley 25-633, creando el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, con el fin de conmemorar a las víctimas, pero sin darle categoría de día no laborable, es decir, sin ser un «feriado». (Gobierno Constitucional elegido por el propio Congreso en la persona del Dr. Eduardo Duhalde). Tres años después, durante la gestión del fallecido presidente Nestor Kirchner, se impulsó desde el mismo Poder Ejecutivo Nacional, que la fecha se convirtiera en un día no laborable, feriado e inamovible.
Algunas personas del ámbito político, como Rodolfo Terragno y del de los derechos humanos, como el premio Nobel de la paz Adolfo Perez Esquivel, Nora Cortiñas (presidenta de Madres de Plaza de Mayo línea fundadora) y organismos como la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) se opusieron al proyecto y recalcaron la connotación festiva del carácter de feriado. La entonces senadora Cristina Fernandez de Kirchner, sostuvo que el feriado era positivo porque «no hay posibilidad de que ningún docente pueda ignorar el hecho».
Veremos también que entre la gran legión de viajeros, tendremos muchos Docentes. Lo cierto e irrefutable es que para la comunidad en su conjunto y visto la enorme cantidad de pasajes terrestres y aéreos que se venden para esta fecha, junto a la gran reserva de hoteles en cualquier rincón del país para hacerse una escapada, este feriado o como se le quiera llamar, representa una burla fabricada desde la misma falsa memoria, alejada de toda connotación seria y responsable, la misma que debería tener sustento en el respeto a quienes de un lado y otro participaron de una época oscura que nos dejó heridas que no terminan de cicatrizar en nuestra sociedad porque aún no aparecen las mujeres y hombres valientes que se jueguen de una vez por una verdad que todos conocen pero por motivos políticos no pueden reconocer y temen perder su lugar en el barro al que han convertido a la política.
Los que peinamos canas sabemos muy bien que en esos turbulentos años de luchas y desencuentros, hubo muchas complicidades de un lado y otro y en especial de importantes personajes que, con el tiempo, terminaron siendo socios en millonarios negocios. Si viviera el bueno de «Minguito», nos diría que esas fotos eran para la «gilada» y así sucedió nomás porque la realidad de la época era muy diferente.
Seguramente el lunes 27-03-2017, leeremos en los diarios o veremos en la televisión, el resultado del «fin de semana largo» como un éxito en la rama turística porque publicarán cifras de turistas o viajeros que aprovecharon para visitar a familiares. El promedio siempre está entre los 6 a 8 millones de ciudadanos con posibilidades de viajar, pero del otro lado y en sus casas, también como siempre, mas de 30 millones de personas continuarán con su vida habitual porque con sus salarios y en esta fecha, poco tienen para gastar.
Llevar el dedo índice a la sien y detenerse a pensar un poco, es un buen ejercicio para poner en práctica la máquina humana de nuestra memoria. En el año 2010, con otro gobierno, el porcentaje de argentinos que vivían por debajo del nivel de pobreza era de 30%. Igual que ahora por el nefasto residual que nos dejaron en la macro y micro economía y no hace falta ser un genio para comprender que en apenas un poco mas de un año de gobierno mucho no se ha podido hacer para revertir la grave situación, pero las cuentas son claras cuando vemos que, históricamente quienes salen de vacaciones o aprovechan estos «feriados», son casi siempre los mismos, con el mismo poder adquisitivo y a quienes, generalmente las crisis nunca dejan de a pie.
En el año 2011 Argentina, tenía 12,534,000 de ciudadanos pobres, de los cuales 4,507,000 ni siquiera podían adquirir la Canasta Básica Alimentaria, por lo cual se los denominaba indigentes y estaban por debajo de la línea de la pobreza.
Seis años han pasado desde aquel triste resultado estadístico y hoy quienes lo provocaron se atreven a desafiar a quienes tuvieron que cargar con todo el desastre que dejaron.
No se trata de defender a un gobierno o un modelo, sino de aceptar que esto se debía solucionar y alguien tenía que hacerlo, con o sin anestesia porque de lo contrario, en algún momento nos quedaríamos en el medio de la nada perdiendo la identidad como nación y peor aún, la posibilidad de insertarnos en el mundo como país soberano.
Si me pidieran que expresara un deseo en voz alta, diría que… «mi ilusión es no ver nunca mas frente a los Bancos, las largas colas de hermanos que mensualmente ponen su tarjeta en el cajero para sacar unos pocos pesos por un plan que solo representa la mentira organizada mas grande de la historia del país».
Todos deberíamos tener un poco mas de confianza en nosotros mismos como nación y poner cada uno un poco de voluntad pero mirando hacia adelante, ese lugar que no conocemos pero seguro estoy, será mucho mas positivo que todo lo que dejamos atrás.
De nosotros dependerá si seguimos con las ideologías o aplicamos ideas para tratar de solucionar los problemas que hoy nos afectan sin distinción de clases sociales.
El autor es: Locutor Nacional-Comunicador.
Capiovi Misiones, Argentina
DNI 7788556