Por Miguel Florentino Jiménez
Desde que comenzamos la actividad política hemos escuchado la frase, UNIDAD PARTIDARIA y al transcurrir el tiempo nos damos cuenta que en la política solamente a los de las bases de los partidos se les pide lealtad, disciplina y unidad partidaria.
Entendemos que todos estos requerimientos son necesarios en una organización política pero deben ser cumplidos desde la cabeza hasta los pies por todas las instancias de los partidos, de ser lo contrario siempre habrá conflictos entre sus miembros.
No es posible unidad cuando los miembros de las altas instancias de un partido comienzan a violentar los estatutos y reglamentos que rigen cualquier organización política pues habrán miembros conocedores de estos requerimientos y ahí comenzarán los conflictos y contradicciones.
Unidad implica la colaboración de todos desde arriba hacia abajo, si logramos establecer y cumplir con este planteamiento no habrá otro camino que no sea la Unidad PARTIDARIA.
Entendemos que la mayor responsabilidad para que exista unidad partidaria está en las cúpulas de los partidos, no se puede lograr esto cuando Los Altos dirigentes violentan las reglas de juegos, el interés colectivo deberá siempre ser más importante que el interés individual de una persona, pues ahí hay un ingrediente para afectar la unidad, necesitamos partidos políticos institucionales para bienestar de la República Dominicana.
El autor es: Abogado, articulista y comentarista de radio y televisión
*