Por Juan Tomás Valenzuela
Hay un lío en el partido
con lo de quitar al penco,
porque no hay en el elenco
alguien más comprometido
en el quehacer del ungido
y su impronta de delitos.
Y es que este caco e’ chorlito
que se apandilló con él,
no le gana a Abinader,
ni han al villajuanerito.
En su mente cacaito,
el presidente Medina,
se creyó que esta guabina
que no ha leío ni paquitos,
le ganaría al erudito,
amo y señor de los vientos.
Confiando en este jumento
que no asistió ni a la escuela,
podría darle hasta gavela
y dejarlo sin aliento.
Pero sucede que no,
que es el penco que no arranca,
por más que le den palanca
los lacayos de Juan Bó.
Ya el plan se les barajó
a Danilo y a Pechito,
pues es hoy, el erudito
y no este penco albacea,
el caprino que más mea
de tó los compañeritos.
A Danilo le salió
el tiro por la culata,
pues quiso engañá a la Tata
y el plan se le barajó.
El delfín que se buscó
pá que siga el barco a flote,
no era más que un galipote
ligado al dolo y al vicio,
y por su falta de juicio
lo tienen de monigote.
Mientras Luis quiere cambiar
la forma de hacer gobierno
a este penco hijo de cuerno
lo quieren dilapidar.
Si no ha logrado arrancar
ni pegándole bencina,
al presidente Medina
y el brother de Servio Tulio,
que busquen un contertulio…
porque esto casi culmina.
Juan de los Palotes
26 mayo 2020