Por Juan Tomás Valenzuela
El ladrón de Villa Juana
brindó un moro navideño,
a los que antes, con desdeñó,
les mandaba a dar macana.
Este rufián, y unos panas,
que bregaban con Quirino,
repartieron pan y vino
a la gente de Santiago,
en donde hizo el show de mago
que acostumbra este cretino.
El que antes lanzaba cajas
desde un camión de Fomento,
volvió otra vez con los cuentos
con los que perdió la faja.
El Joker de la baraja
de la política criolla,
repartió arroz con cebolla
a unos cuantos infelices,
y les trazó directrices
para salir de la olla.
Usando la antigua frase
de que “comer el primero”
este maldito aguajero,
sin vergüenza y mala clase,
después de hacer que se atrase
gran parte de la nación,
con toda la corrupción
que santificó en su era,
se para desde otra acera
a hablar de alimentación.
Ahora que la comía
ya no sé la están robando,
quiere venirse burlando
del que busca mejoría.
Anda hablando porquería,
dizque “Comer es primero”,
después que él y su escudero
cometieron tanto dolo,
ese sucio “comesolo”
dice que Luis no es sincero.
Juan de los Palotes
20 diciembre 2021