Por Juan Tomás Valenzuela
El senador de San Juan,
hablando de su fortuna,
dijo que llega a la luna
si la apilan como pan.
Pero este buen charlatán,
cuando estudiaba en la UASD
comía por casualidad,
solo si algún compañero
lo invitaba al friturero,
o a la fonda de Tatá.
Pero sucede que ahora
después de 5 gobiernos,
el otrora gato tierno
que nunca bebió cremora,
maneja una constructora
que trabaja pa’l Estado,
que ya tiene acumulado
más dinero que Fefita,
que Leonel y Margarita,
que Rondón, Temo y Conrado.
“Departamento de Estado”
cree que toda esa fortuna,
pa’quien padeció de hambruna
es un monto exagerado.
Que eso es dinero robado,
ganado fuera de ley.
No hay nadie en este batey
que pueda hacer un consorcio,
que deje más que el negocio
de Donald Trump o Bill Gate.
Cuando el señor Senador
dice que él mismo no sabe,
nos está dando la clave:
Esto es oro corruptor.
Este es otro malhechor
de los que tiene el Partido.
Que aunque no es de los ungidos,
tampoco es menos cierto
que antes jedía a perro muerto
y hoy es un favorecido.
Pero le llegó su fin
al ahijado de Leonel.
Este gato va a caer
como el jefe de Crispín,
Aunque él priva en sayayín,
si es frente a Domínguez Brito,
que sepa que estos blanquitos
tienen el juego pesado
y de lo que ha acumulado
no va a quedar ni un kilito.
El señor Félix Bautista
y su protector Leonel,
quien sabe que irán a hacer
con esta nueva ventisca.
Ellos están el la lista
de los Gringo y del Ungido.
Ya les tienen el hervido,
tanto es USA como aquí
y hasta el último quiquí
pueden darlo por perdido.
15 junio 2018