Por Juan Tomás Valenzuela
Chisme y contraacusaciones
entre la Berly y Yokasta,
una le tira canastas,
la otra le tira cajones.
Una de contrataciones,
la otra de la Dirección,
y es propicia la ocasión
para explicarle a la gente,
que entre estas dos incumbentes
no se saca ni un moj…
La directora de Compras
ha dicho que Berlinesa,
de forma burda y aviesa,
siempre tenía una recontra,
para que todas las compras
que se haga en la institución,
conlleven la aprobación
de un hermano del ungido,
que está entre los detenidos
por dolo y por corrupción.
Por su parte, Berlinesa
también acusa a Yokasta
de venderse pura y casta,
ocultando tras la mesa,
la condición de tigresa
y promotora sexual,
y esto le ha caío tan mal
en la gente de su entorno,
que ubican este bochorno
como algo antinatural.
Entre dimes y diretes
estas dos “prestantes damas”,
ponen en riesgo su fama
como si fueran vedettes.
La comadre del “tolete”
y la rubia de farmacia,
en medio de la desgracia
que hoy enfrenta el danilismo,
luchan con un vulgarismo
que empaña la democracia.
Me dicen que Berlinesa
ha hablado hasta por los codos,
del penco, de Cuasimodo
y de la Madre Teresa.
Fueron tantas las bajezas
que dijo que había vivido,
que ni trancando al ungido
junto a todos sus secuaces,
se lograría hacer las paces
con su difunto marido.
Juan de los Palotes
4 diciembre 2020