Por Juan Tomás Valenzuela
Muy correcta la exponencia
de Mario Arturo Fernández,
sugiriendo que se mande
a auditar la misma agencia.
La falta de transparencia
del organismo gestor,
lo hacían ver compromisor
de regímenes pasados,
que drenaron al Estado
por órden de un corruptor.
No me llega a la memoria
y entiendo que si lo ha habido,
algún ser comprometido,
aún de forma transitoria,
conque las ejecutorias
de este cluster de auditores,
se hayan hecho a las mejores
propuestas de bien común,
y no a cambio de ningún
intercambio de favores.
Hacerle una auditoría
a la Cámara de Cuentas
y cantarle “Las Cuarentas”
a tó esa gavillería,
no solo constituiría
un salto a la transparencia,
sino que la negligencia
que se ha mostrado hasta ahora,
bien podría ser la Pandora
de toda esa dependencia.
Yo secundo a Mario Arturo,
y ojalá los diputados,
puedan, con este abogado
de corazón noble y puro,
apostar a lo seguro,
a lo correcto, moral.
Y con él, transparentar
no tan solo una gestión,
sino que la corrupción
no tenga donde anidar.
Juan de los Palotes
6 febrero 2021