Por Juan Tomás Valenzuela
Hoy regresa la Funglode
del cuejnú con alitósis,
y viene como micosis,
a ver si así es que nos jode.
Con más propiedad de Herodes
(y más mala fé también),
viene cuál llegó Ditren
de las manos del León,
a imponer su maldición,
como impusieron su harem.
La enfermedad se presenta
como una infección cutánea,
que de manera instantánea
se refleja en nuestras cuentas.
La picazón se presenta
en forma de sarpullído,
y come más que el ungido
en una junta de riego,
de los meses veraniegos
que gobernó este bandido.
La Micosis de Funglode
es cuando los lifoncitos
de la fórmula de Ito
dá una comezón que jode.
Lo que hace que esto incomode,
es que los glóbulos blancos,
se tiran por un barranco
y se vuelven cancerosos,
igual que aquel ñú aqueroso
que pretendía el paso franco.
Pero el Banco Popular,
a través de donaciones,
le repartió unos millones
a quienes van a accionar.
Esto se puede curar,
si se interviene con tiempo,
si no encuentran contratiempos
los científicos actuantes,
también, si le echan el guante
a Leonel, antes de tiempo.
Juan de los Palotes
21 junio 2022