Por Juan Tomás Valenzuela
Mientras Biden y la OTAN
siguen triunfando en Ucrania,
las estrellas de la Fania
no saben ni dónde están.
Se le está acabando el can
a los Estados Unidos,
de mantener sometidos
a los países chiquitos,
a través de ese jueguito
de controlar el fluido.
Le salió duro Putín,
a la gente de Bidén,
que le había puesto un retén
pá enliarlo por el fullín.
El último boletín
que ha llegado de Moscú,
certifica que el granú
que está en el Soviet Supremo,
en ves de buscar a Nemo,
anda detrás de Mambrú.
Las restricciones impuestas
a Rusia, en este conflicto,
a quien mantienen convicto
es al que pagó la fiesta.
La OTAN aún no está dispuesta
a rendírsele a Moscú,
quien ahora lleva un cachú
con el imbecil de Kiev,
quien solamente en la Web
le gana al papi champú.
Una bandada de idiotas
anda emitiendo opiniones,
que Kiev tumban los aviones
y le está hundiendo las flotas,
al hombre que más pelotas
ha enseñado en el conflicto.
Y ya han dado el veredicto
de que Putín va a perder,
igual que perdió Leonel
y el ñú que sigue interdicto.
Juan de los Palotes
12 junio 2022