Por Venecia Joaquín
Lluvia de mensajes se desprenden de las actitudes y acciones del Ing. Miguel Vargas, al informarle por escrito al director del Instituto Dominicano de Seguro Social, IDSS, Dr. César Mella, que designaría otra persona en su lugar. El Ing. Vargas, presidente del PRD y Ministro de Relaciones Exteriores es, sobre todo, un hombre de negocios.
Con esa decisión, ha puesto de manifiesto cómo su pequeño partido negoció con el PLD y cómo se reparten el pastel cuando hay alianza. “Esta es tu tajada y puedes hacer con ella lo que desees” Entonces Miguel, busca la designación de alguien que siga sus lineamientos. Todo parece indicar que César Mella, no los siguió. Más que pensar en hacer del IDSS una fuente de “botellas”, de contratar personas buscando votos para engrandecer el PRD chiquito, decidió hacerle una reingeniería, para prestar servicios a la población. A Miguel, no le ha gustado. De ahí que, por escrito, sin tener en cuenta las reglas más elementales del compañerismo, de “la diplomacia”, le informó que designaría otro en su lugar.
Ha trascendido que César, encontró el IDSS desorganizado; con una deuda de alrededor de mil trescientos millones de pesos; que en el año que ha estado laborando, pagó una gran parte; que evalúa con objetividad el personal buscando técnicos eficientes; que ha aplicado austeridad y control del gasto.
Al presidente del PRD, parece que no le conviene tanta austeridad. De hecho, aseguran que la limpieza que hizo Andrés Navarro. en la Cancillería, cuando era Canciller, buscando fortalecer las relaciones internacionales, no existe; que tras Miguel, ocupar esa posición, la ha llenado de malezas, de “botellas”, tanto en el país como en el exterior ¡Qué pena!
¡Es obvio, que cuando le escribió a César, para informarle que designaría otro, fue un decirle “la parcela es mía, hago lo que quiera y ni el presidente puede meterse” Anjá! ¿Y la población que paga impuestos para recibir servicios eficientes?
Alguien debe decirle a “Micky el que resuelve” como le llama uno de sus promotores, que esa parcela y las otras que maneja, no son para darle obsequios a “comunicadores” que lo alaban ni a compañeritos de partidos; que le conviene exhibir el trabajo eficiente que puede darle a la nación, cuando el PRD crezca y gane las elecciones. Es la mejor forma de conseguir votos.
Confieso que me entristecen los dirigentes políticos con vacíos en su personalidad. Suelen confundir los roles. Esos vacíos pretenden llenarlos con dosis de poder y dinero que disparan sin miramiento.
Para tomar las riendas del PRD, Miguel se las ingenió aun hiriendo colegas y descartando principios del partido. Lo logró. Pudo apoyar el PLD y conseguir tajadas del pastel. Hoy, con rostro austero, exhibiendo poder y orgullo, busca votos sin importarle la calidad del servicio que presta a la nación.
Lo que está haciendo Cesar como Director del IDSS, no es lo que Miguel esperaba. Necesita otro que maneje esa institución con criterios personales, grupales, no con criterios normativos ni nacionales. ¿Qué hará César Mella?, ¿Cambiará la ética profesional para complacer a Miguel o seguirá pensando en el pueblo?
Pido a Dios, que nos ayude a tener al frente de las instituciones públicas y de los partidos políticos, a ciudadanos honestos, con fuerte personalidad, que con firmeza y coraje sean capaces de pensar y defender, el bien común ¡la Patria!