Por Juan Tomás Valenzuela
Evitándose un escándalo,
en la Dirección de Aduanas,
el viernes en la mañana
desvincularon a un vándalo.
Pero allí queda otro zángano,
que es vástago de Fiquito.
Que tá metío en corito
con el señor director,
y de esa junta, señor,
no saldrá nada bonito.
El señor Miltón Cordero,
del grupo de Jean Alain,
desde que lo cancelán,
usó a Yayo de escudero.
Este y el otro aguajero,
hijo de Fiquito Vásquez,
hicién que Yayo la masque
contratando en su despacho
a los que apagán el jacho
pá que el PRD se atasque.
“Lechuga” cogía un billete
en la Procuraduría,
y la función que tenía
era servir de zoquete.
Pero cuando Peterete
salió de la presidencia,
llegó una nueva gerencia
a la Procuraduría
y allí “Lechuga” perdía
toda la beneficencia.
Con lo que nadie contaba
era que Sanz Lovatón
nombraría a este güevón
pá que siga hablando baba.
Yo mismo me lamentaba,
pues fui de los más sufrido.
Tanto afán pá que el ungido
salga por la puerta estrecha,
sin embargo hasta la fecha,
Yayo a mi, no me ha cumplido.
Juan de los Palotes
3 julio 2021