Por Juan Tomás Valenzuela
Jugando a la desmemoria,
el bandido de Leonel,
habló pluma e’ burro ayer,
tergiversando la historia.
Este rufián, y la escoria
que pulula en su partido,
andan generando ruido
sobre los precios del pollo,
olvidándose del tollo
de su nefasto período.
El mismo que vendió el oro
a noventa y siete/ tres,
nos trae la desfachatez
de que aquí hace falta el moro.
Y tanto que le hacen coro
a este maldito ladrón,
padre de la corrupción,
especialistas en dar muela,
cundango de siete suelas,
pa’no decir m…
Un pájaro, que sus vuelos
a escenarios extranjeros,
nos costaron en dinero
un gobierno paralelo.
Ahora pega el grito a cielo
porque a la carne de pollo,
se le ha presentado un rollo
con esta fiebre porcina,
que igual que él y los Medina,
tienen al pueblo en el hoyo.
Leonel, ayer puso a prueba,
la capacidad de olvido,
de este pueblo desvalido
culpa de la banda Ameba.
Cuando este truhán y su jeva
gobernaron la nación,
se instaló la corrupción
desde su mismo despacho,
y ahora tiene el desempacho
de hablar de improvisación.
Juan de los palotes
23 agosto 2021