Por Juan Tomás Valenzuela
Según declaró la Armada,
era un miembro del CIUTRAN,
el agente charlatán
que disparó la granada,
a personas desarmadas
que del modo más pasivo,
protestaban contra el vivo
que organizaba el certamen,
pretendiendo que nos mamen
los ñú del ejecutivo.
Explicó Paulino Sem,
hablando en rueda de prensa,
que la despreciable ofensa
no fuén ellos que la dién.
Que sus soldados también
pudieron verse afectados,
de la acción de estos tarados
bajo la orden de un hermano
de ese zopenco arrellano,
mañoso y desvergonzado.
“El guardia que disparó
iba en la cola de un 15,
me dijeron que era un “lince”,
pero después se aclaró.
El motorista dobló
casi encima e’los contenes,
se le ordenaba que frene
y no obstemperó al llamado,
y como iba encapuchado,
nadie supo a que se atiene”.
Aunque sus malas acciones
se le endilgan al CIUTRAN,
los hechos no bastarán
para tomar precauciones.
Además, las condiciones
en que pasaron los hechos,
no le otorgaba derecho
a bombardear a la gente,
lo cierto es que el presidente
no va a castigar el hecho.
Estos pobres oficiales
fueron voluntariamente
a dispersar a la gente
y a sus protestas banales.
No diré quiénes ni cuáles
lanzaron las molotov,
pero si alguien se ofendió
con eso de la granadas,
que no le dé mente a nada,
que esa vaina ya pasó.
Juan de los Palotes
19 febrero 2020