Por Ana María Ureña
El dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), José Casimiro Ramos Calderón, quien se desempeñaba en el gobierno como director general del Instituto del Tabaco de la República Dominicana (Intabaco), anunció su apoyo al «Proyecto Leonel 20-20».
Ante este paso su jefe Danilo Medina, tomó la decisión de destituirlo ipso facto, sustituyéndole por Manuel Alejandro Ureña Tavera, mediante el decreto 71-19, haciendo uso de su accionar de los últimos meses de que:
«Quien tenga una posición en el gobierno y no está conmigo, y ahora con Gonzalo Castillo, se va de «Mi gobierno MIO»».
José Casimiro Ramos Calderón, estuvo como director del Fondo Especial para el Desarrollo Agropecuario (FEDA), hasta el 24 de febrero pasado, cuando fue designado en el Intabaco.
Con esta acción, más muchas en otros ámbitos, Danilo Medina, envía un mal ejemplo no solo al PLD, sino a la ciudadanía en general, de que estamos bajo una dictadura en ciernes. Además de hacerse más indeseable.
El pueblo dominicano debe darle gracias a Dios y a todos a los que él le permitió luchar en contra de que vulneraran nueva vez la Constitución de la República, que este intolerante sólo estará maldirigiendo los destinos del país hasta el 16 de agosto del próximo año.
Quisieramos aprovechar para que alguien nos recuerde y señale cuantos fueron los apartados del Gobierno del Presidnete Fernández, para la reelección del año 2008.
