Por Guillermo Martínez Urtarte
La construcción del proyecto habitación »El Riito» en la olímpica y culta ciudad de La Vega, constituye un gran escándalo.
Lo primero que llama la atención es que esta obra que tiene un costo de 3 mil millones de pesos esta siendo ejecutada por el Ministerio Administrativo de la Presidencia, y no como debe ser por el Ministerio de Obras Públicas (MOPC) y supervisada por el organismo creado por el Presidente Doctor Joaquín Balaguer, para tales fines, la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (Oisoe).
Esta obra se construye en franca violación de la Ley 64-00, que rige el medio ambiente, puesto que se esta edificando a treinta (30) metros del río Camú, lo cual constituye un riesgo para quienes habiliten los 164 apartamentos de que consta el proyecto.
La construcción de un muro de gaviones que supuestamente evitaría la inundación del proyecto, ha demostrado en la práctica ser un despilfarro de recursos, que no ha servido para nada ante la reciente inundación provocada por la creciente del río Camú, debido a las lluvias ocurridas en los últimos días.
La improvisación fruto de los intereses que genera la corrupción y el tráfico de influencias debe de terminar para siempre en nuestro país, para ello deberemos esperar el surgimiento de un nuevo gobierno integrado por personas honestas y capaces en los comicios del año 2020.